Profundo malestar provocó en Consejeros Regionales de La Araucanía y grupos ambientalistas de Temuco la actitud de los ejecutivos de Celulosa Arauco y Constitución, que decidieron no asistir a la invitación que realizó el Core para que informen sobre el impacto ambiental que tendrá en la región el proyecto de instalación de un ducto al mar para desechos industriales.
Esto luego de la polémica aprobación de la autoridad ambiental de Los Ríos, y que permite verter en el borde costero residuos industriales líquidos, que impactarían en la biodiversidad marítima de La Araucanía producto de la corriente de Humboldt.
Andrea Flies, consejera regional, culpó a la Conama de no haber incluido a La Araucanía como zona de impacto, lo que en definitiva no obliga a Celco a dar explicaciones a los habitantes de la región.
Quien indicó que esto demuestra el desprecio que tiene la celulosa hacia el mundo político y de la sociedad civil fue Alejandra Parra, vocera de la Red de Acción por los Derechos Ambientales de Temuco.
Julio Suazo, presidente provincial de la CUT, se mostró preocupado por la actitud, asegurando que defenderán las fuentes de trabajo de los pescadores artesanales del borde costero de La Araucanía.
Celulosa Arauco y Constitución, a través de su equipo de comunicaciones, informó que no recibieron ninguna invitación formal para participar de esta reunión, señalando que ellos por ley sólo responden a los requerimientos de la Conama en la Región de Los Ríos.
