Ha pasado poco más de una semana desde que un sujeto de nacionalidad venezolana, vinculado al homicidio del denominado “Rey de Meiggs”, que en libertad, luego de que se declarara su prisión preventiva. Desde ese momento hasta esta jornada de viernes, se han registrado una serie de errores, como la orden judicial que permitió su salida de la cárcel y la confusión en su nombre.
En medio de este escenario, en el Expreso bío Bío nos comunicamos con Valeska Troncoso, investigadora del Centro de Estudios sobre el Crimen Organizado Transnacional (Cecot) y académica de la Universidad de Santiago (Usach), quien abordó las falencias institucionales de nuestro país en el combate a las bandas criminales.
Cabe mencionar que esta mañana se reveló la identidad real del prófugo (Alberto Carlos Mejía Hernández), pero minutos antes de aquello se había informado otro nombre (Carlos Alberto Mejía Hernández).
Ante esta situación, Troncoso sostuvo que “hoy nos encontramos nuevamente con una información que nos pone bastante en alerta. ¿Cómo se están desarrollando las investigaciones y procedimientos? Es ponernos en alerta si efectivamente estamos buscando al criminal correspondiente”.
“Esto ha llevado a una pérdida bastante importante, tras una semana, de poder buscar a la persona en cuestión”, agregó.
Las falencias en el combate contra el crimen organizado
Por otra parte, la investigadora explicó, en parte, la cadena de errores en medio de este caso: “Primero, con este informe de la Fiscalía, que todavía no se sabe muy bien cuál fue el error en particular (…) Ahora, saber que no teníamos identificado el nombre porque era una persona que había entrado al país de forma irregular”.
En ese sentido, apuntó al largo tiempo que pasó para concretar el cruce de información relevante, como, por ejemplo, entre las huellas digitales y la verdadera identidad.
“Eso es preocupante, un poco qué está pasando en el Poder Judicial, pero también en Gendarmería”, dijo.
Ante la interrogante sobre quién es responsable de la liberación del prófugo, Troncoso enfatizó en que “más que buscar al que tiene la culpa, hay que centrarnos en que no hay una institucionalización sólida por parte del Estado de Chile -no del gobierno-“.
“Siempre hay que partir por la cabeza. Si la institucionalidad estatal no ha logrado poder hacer una coordinación interagencial es porque realmente no ha habido una conciencia de que es el crimen organizado. Y creo que el problema es que no se dimensionó nunca la envergadura de esta amenaza transnacional”, añadió.
De todas maneras, planteó que “estamos a tiempo (de hacer algo). Ser alarmista sería decir que estamos demasiado tarde, y sería bajar los brazos”.
En la misma línea, la experta argumentó que “lo que nosotros podemos hacer es, literalmente, un fortalecimiento del Estado frente al combate del crimen organizado. Eso implica no solamente medidas a corto plazo, sino comprender que es un fenómeno que no se va a ir del país, lo tenemos instalado, tenemos organizaciones criminales”.
“Lo que hay que hacer es una inteligencia y contrainteligencia para poder adelantarse a todos los modus operandi que las organizaciones están desarrollando día a día”, siguió.
Específicamente, dentro de las medidas que habría que implementar, planteó que “tiene que ver con inteligencia de la Fiscalía, con inteligencia financiera, que eso es importantísimo, es una de las más relevantes, porque estamos hablando de una empresa criminal”.
En ese sentido, al ser consultada sobre el levantamiento del secreto bancario, que hoy se mantiene en la discusión política, Troncoso sostuvo que “esa es una muy buena opción, existe hoy para poder desarrollar operaciones e investigaciones. Pero, sería bastante importante porque permitiría incorporar nuevos delitos, porque hoy no sólo vemos narcotráfico, vemos sicariato y ese no está incluido en el alzamiento del secreto bancario”.