Tras vivir varios años batallando contra las adicciones, la actriz Amanda Bynes parece ir bien encaminada en su recuperación.
Así quedó claro este viernes cuando fue captada por los paparazzi saliendo de un supermercado en Los Angeles, Estados Unidos, junto a su coach de vida, Joy Stevens.
En la ocasión la actriz llevaba un outfit sencillo compuesto por un cardigan beige, una polera blanca y pantalones negros, además de no llevar maquillaje en su rostro.
La actriz también evidencia un aumento de peso, el que sería un efecto secundario de su medicación para sus problemas mentales.
Recordemos que la última vez en que la actriz fue vista en público fue en el programa Hollyscoop, donde concedió una sincera entrevista.
Entre otras cosas, Amanda contó que había decidido estudiar moda y está realmente entusiasmada con ello. “Aprendí a coser y quiero comenzar una línea de ropa en el futuro. La escuela me ha ayudado mucho con eso”, dijo.
Pero no es la única cosa que llena su vida. “También hago caminatas, tomo clases de spinning y alimento a los desamparados, y eso ha sido muy interesante y divertido”, agregó sobre su nueva vida.
También señaló que extraña actuar, aunque no descarta volver a la televisión. “Quiero regresar a la TV. Tal vez participar de invitada en algún show del que sea fan u otro programa donde pueda ser la estrella en el futuro”, afirmó.
Recordemos que antes de sufrir las consecuencias de sus adicciones, Amanda era una estrella en ascenso que protagonizó varias cintas como Big Fat Liar y Easy A, junto a Emma Stone.
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