El Juzgado de Letras y Garantía de Chanco autorizó la exhumación del cuerpo de Hernán Canales, el hombre que falleció tras ser atropellado por el vehículo que conducía el hijo del presidente de Renovación Nacional Carlos Larraín. La autopsia determinará si Canales pudo haber sobrevivido en caso de haber sido llevado a un centro asistencial.
Canales falleció la madrugada del pasado 18 de septiembre en un sector cercano a Curanipe, región del Maule, luego de ser atropellado por el jeep conducido por Martín Larraín.
Su cuerpo, que fue sepultado en el cementerio parroquial de la localidad, será exhumado para realizar una nueva autopsia que determine si antes de fallecer pudo ser auxiliado por el hijo del parlamentario.
Esta pericia se suma a la autopsia que ya hizo el Servicio Médico Legal y que indicó que Canales falleció a causa de las heridas que le provocó el atropello.
El abogado de la familia de Hernán Canales, Gonzalo Bulnes, explicó que esta nueva diligencia permitirá saber ante qué figura penal se expone Larraín.
El senador Carlos Larraín, en conversación con Expreso Bío Bío, afirmó que desde el primer minuto aconsejó a su hijo sobre cómo abordar la situación.
Según precisaron en la Fiscalía Regional del Maule, durante los próximos días se realizarán los trámites administrativos que permitan la exhumación y el traslado del cuerpo de Hernán Canales al Servicio Médico Legal de Cauquenes.
