Las casas prefabricadas son una alternativa económica y rápida para quienes buscan adquirir una vivienda. No obstante, dependiendo del lugar en donde se edifiquen, se deben considerar aspectos como el clima y las características del terreno, más aún en zonas más húmedas como el sur del país.
El sur de Chile destaca por ser una zona de naturaleza nativa y magníficos paisajes, atributos que la convierten un lugar ideal para vivir. Sin embargo, su clima húmedo, abundantes lluvias, fuertes vientos y bajas temperaturas son algunos puntos a considerar al momento de construir una casa prefabricada en esta zona.
En este sentido, Felipe Nawrath, gerente general de Casas Archipiélago, empresa de viviendas prefabricas ubicada en Puerto Montt y Castro, explicó a BioBioChile lo primordial a la hora de edificar una residencia en esta parte del territorio nacional.
“Tanto en la zona sur como en el resto del país, lo principal es la calidad de los materiales para la durabilidad de las casas. Ahora, específicamente en el sur, se requiere cumplir con determinadas características”, afirmó Nawrath.
Uno de los materiales usados para estructuras a prueba de bajas temperaturas y lluvia es la madera impregnada, un elemento de alta durabilidad y usada generalmente para construir dado su alta eficiencia.
El también especialista en construcción detalló que para este tipo de viviendas “la madera impregnada es ideal para la humedad, pues entrega mayor calidez en comparación a una casa construida con ladrillos. Además, es mucho más fácil calefaccionar una casa de madera”.
Para obtener este material, la madera es procesada en una máquina a presión donde es tratada con un líquido especial que contiene arsénico, óxido de cobre y óxido de zinc, dándole una barrera protectora.
“Durante el proceso, el líquido penetra unos milímetros, deja la madera con una tonalidad verde y genera una capa que la protege de los hongos, la humedad e insectos como las termitas. Esto se hace sobre todo en madera de pino”, acotó el representante de Casas Archipiélago.
Una casa prefabricada a prueba de lluvia y frío
Dado las condiciones climáticas del sur, se recomienda construir casas con estructura de madera. En cuanto al forrado exterior de la casa, se puede revestir con madera secada en cámara, un tratamiento especial para evitar que se doble con la reiterada exposición al sol y lluvia.
Por otra parte, el especialista en construcción recomienda utilizar ventanas termopanel. “En el fondo son una inversión. Los termopaneles son una opción para después ahorrar en la calefacción de la casa, sobre todo en el sur”, comentó.
En cuanto al techo, se aconseja instalar planchas de zinc, ya que es una alternativa económica que puede condensar la humedad. También se recomienda usar papel fieltro bajo el zinc para evitar filtraciones del agua lluvia hacia la vivienda.
Respecto a las capas de aislante, se recomienda que sea lana de vidrio. “Este material no deja que entre el frío y tampoco salga el calor”, comentó Nawrath.
Por otro lado, considerando la humedad en la zona, el suelo del sur es totalmente diferente. “Los radieres de cemento son lo mejor, pero en terrenos del sur, la gran mayoría de las veces, no son lo más recomendable debido a la humedad”, puntualizó el gerente general.
Bajo estas condiciones, “el radier puede traer muchas complicaciones a mediano y largo plazo. No siempre es la solución debido a los desniveles en el terreno, la humedad y los problemas que se puede generar con los deslizamientos de tierra”, agregó.
El especialista en construcción recomendó que en estos casos se pueden usar apoyos de cemento, vigas de madera, terciado, para luego montar un piso flotante o cerámica en el baño.
Mantenciones de una casa prefabricada ¿qué se recomienda?
Como en toda vivienda, las mantenciones son necesarias para evitar problemas estructurales o daños producto de la humedad, más aún si se trata de casas prefabricas instaladas en climas más fríos y complejos como los del sur de Chile.
En este sentido, Felipe Nawrath recomendó una realizar, al menos, una mantención anual de estas viviendas, la cual debe considerar techumbre y revisión de los sellos, clavos o tornillos. Además, en la fachada, se aconseja utilizar impermeabilizante de madera o pintura especial para la humedad.
“El revestimiento y todos los materiales que se ponen al exterior, sufren porque el clima es duro en el sur, entonces se recomienda una mantención anual, que incluya pintado y/o barnizado. Mientras más mantenciones se le hagan, va aumentando la durabilidad”, comentó.
La vida útil de este tipo de casas es variable y depende de su conservación, así como de los productos usados en ella y, sobre todo, del clima al que están expuestos.
“Una casa prefabricada común debería durar unos 15 o 20 años. Ahora, si cumple con todas sus mantenciones de forma periódica, podría alcanzar los 30 años”, señaló el gerente de Casas Archipiélago.
