Entrar a una tienda. Elegir un producto. Salir de la tienda con el producto pagado sin pasar por una caja o sacar el teléfono o mostrar el reloj digital. Parece ficción, pero sí, es posible, y no solo en economías digitales más desarrolladas, sino también aquí en Chile.

Aunque todavía hay muchas personas que sienten esta realidad como algo lejano, lo cierto es que todos los avances a nivel internacional en métodos de pago evidencian que las tecnologías irán avanzando rápidamente hacia los llamados pagos invisibles, tendencia que permite realizar compras físicas u online sin la necesidad de pagar con medios tradicionales como tarjetas de crédito o débito.

En su reciente Encuesta Nacional de Uso y Preferencias del Efectivo correspondiente a 2022, el Banco Central recordó que la trayectoria de las tarjetas de débito ha mantenido un sostenido crecimiento desde 2017 y que la pandemia de coronavirus aceleró la necesidad de realizar pagos sin contacto físico.

Se trata de un hábito que cada día gana más adeptos y que ayuda a reducir el tiempo y los pasos al efectuar alguna transacción, permitiendo pagar de manera fácil, simple y segura.

De esta familia, los pagos QR y billeteras digitales son los que han tenido mayor auge en nuestro país desde su irrupción en 2018, conquistando consumidores gracias a experiencias de pago rápidas y únicas. Su silenciosa masificación ha significado, que actualmente el 20% de las compras online en Chile se realicen a través de códigos QR.

Los pagos invisibles han ido tomando tanta fuerza que el 54% de los expertos consultados en último informe “Tendencias de Medios de Pago” elaborado por la consultora Minsait Payment consideró que las billeteras digitales y/o móviles como PayPal, Apple Pay y Google Pay, entre otros, serán los medios de pago utilizados con mayor frecuencia por los consumidores dentro de los próximos cinco años.

En el mundo, los avances son notables. Gigantes tecnológicos como Amazon y AliExpress ya llevan tiempo impulsando sus opciones de pagos sin contactos, creando nuevas oportunidades tecnológicas que marcan pautas en los comercios.

Chile también avanza y nos estamos posicionando a la vanguardia regional en términos de automatización y de pagos invisibles, gracias a la masificación de internet y la hiperconexión. Testimonio de ello son los incipientes comercios que ya están funcionando al alcance de la mayoría: hace poco se inauguró una tienda 100% autónoma e inteligente, en la que diversos sensores captan lo que la persona toma y lo cargan a su tarjeta. Sin trámites, sin ningún contacto.

¿Estamos lejos aún de los pagos invisibles? No, estos están cada vez más integrados a nuestra vida diaria. Entonces, comprar sin tener que pagar no es el futuro, es el presente.

Nuestra sección de OPINIÓN es un espacio abierto, por lo que el contenido vertido en esta columna es de exclusiva responsabilidad de su autor, y no refleja necesariamente la línea editorial de BioBioChile