La Superintendencia de Servicios Sanitarios en la región del Bío Bío fiscalizó las plantas generadoras de agua potable de Los Ángeles y Mulchén y descartó que ocurra una situación similar a la registrada en Osorno con el servicio.

La gestión se llevó a cabo tras la petición emanada desde el Ejecutivo, referida a estudiar las condiciones de las plantas de agua potable debido a la emergencia ocurrida en la región de Los Lagos.

En la capital provincial, se estudiaron los dos sistemas de producción, ubicados en calle Gabriela Mistral y en la ex Panamericana.

Según explicó el jefe de la Oficina Regional de la Superintendencia de Servicios Sanitarios, Rodrigo Riquelme, en Los Ángeles hay captación por pozos profundos, por lo que descartó que se registre una situación similar a la de Osorno.

Riquelme añadió que en Mulchén, si bien la captación es superficial, tampoco existe riesgo de contaminación por combustible.

Consultado por el estudio que hizo la Dirección General de Aguas, el que arrojó la posible presencia de coliformes fecales fuera de la norma, Riquelme explicó que eso no está presente en el sistema de captación para la producción de agua potable, sino que en el Estero Quilque, que no es una fuente de agua cruda para la planta.

El jefe de la Superintendencia comentó que solicitaron el referido estudio de la Dirección General de Aguas que se hizo el 2017.

Respecto al posible riego de hortalizas con esa agua, Riquelme aseguró que no se podía referir al tema ya que no les compete como entidad, sino que ellos se enfocan en el tratamiento de las aguas servidas, lo que indico estaría cumpliendo Essbio.

A continuación el informe completo de la SISS sobre la fiscalización extraordinaria a los sistemas de agua potable.