La tarde de este miércoles, la Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados aprobó la idea de legislar sobre el proyecto de Ley de Identidad de Género, al cual el Gobierno puso discusión inmediata.

Los diputados esperan que el proyecto sea puesto en tabla en la Sala el día martes 16 de enero. Para ello, la idea es que el jueves próximo se despache de la comisión.

El diputado de la DC, Jorge Ojeda, presidente de la instancia, dijo que disiente de “la actitud del Gobierno, de habernos dado primero suma urgencia y ahora discusión inmediata. Pero nosotros tenemos que cumplir y tenemos que llevar adelante este proyecto. Me hubiese gustado profundizar más, haber prolongado un poco más la discusión y haber recibido mayor cantidad de organizaciones (…) El Senado tuvo 4 años y nosotros apenas dos meses, nos hubiera gustado estar mucho más tiempo en esta discusión, pero ya, estamos en esto (…) estamos contentos”.

La votación, que se realizó luego de una intensa discusión entre parlamentarios, organizaciones y público asistente, fue de 8 votos contra 4. A favor lo hicieron (Felipe) Kast, Poblete, Letelier, Gutiérrez, Saffirio, Saldívar, Ojeda y Carvajal; en contra votaron Coloma, Paulsen, Sabag y Bellolio.

Debate

En el debate expuso Zuliana Araya, concejal transgénero de Valparaíso; Marcela Aranda, impulsora del Bus de la Libertad; y Pía Adriazola, esposa de José Antonio Kast.

Adriazola, entre otros argumentos, cuestionó que una verdad objetiva, como el sexo verificado en el acta de nacimiento, entre en contradicción con una percepción subjetiva que, en este caso, y tal como lo describe el proyecto, sería la convicción personal de “cómo la persona se percibe a sí misma”. La pregunta es, dijo la esposa del excandidato presidencial, “¿la identidad se basa sobre una realidad objetiva o sobre una realidad subjetiva?“, asegurando que la certeza jurídica requiere datos objetivos (…), “o sino, yo podría decir ‘soy una persona de 60 años y quiero que me jubilen"”.

Zuliana Araya, quien además es presidenta de un sindicato transgénero de su región, recordó que el Estado les debe mucho ya que hace 20 0 40 años atrás la discriminación los condenaba a la muerte en cárceles y a la tortura por sólo andar vestidas de mujer. “Yo lo viví, lo sufrí, ejercí el comercio sexual 33 años. Cuando trabajábamos en el norte la policía nos iba a dejar botadas a la pampa, ahí mataban a nuestras compañeras”. “Queremos esta ley porque nuestras compañeras siguen sufriendo, en los hospistales o para hacer trámites”, agregó.

Marcela Aranda, la impulsora del Bus de la Libertad, acusó una “utilización del caso de su hijo” por parte del Movilh y del Gobierno. Aranda, también aseguró que el “lobby de la diversidad sexual se llevó a su hijo” y no la dejó hablar con él, “nunca antes manifestó una actitud afeminada o ninguna actitud que manifestara una inclinación hacia el sexo femenino”.