El grupo yihadista Jund al Aqsa ejecutó a 41 combatientes rivales, integrantes de la exrama de Al Qaida en Siria y de facciones aliadas, en la provincia de Idlib en Siria, indicó este viernes una ONG.

El Observatorio Sirio de los Derechos Humanos (OSDH) afirmó que Jund al Aqsa capturó a sus víctimas y las ejecutó a tiros en la localidad de Khan Sheikhun el lunes, aunque su muerte no se confirmó hasta el viernes.

Jund al Aqsa y Fateh al Sham, la exrama siria de Al Qaida, se enfrentan desde el lunes en la provincia rebelde de Idlib, cuyo control se disputan.

Los combates, que se han extendido hasta la provincia vecina de Hama, dejaron 125 muertos en ambos bandos, incluidos los 41 ejecutados por Jund al Aqsa, según el OSDH.

Este grupo, al que Washington califica de “terrorista”, suscita el odio de la mayoría de los grupos rebeldes en la región.

Enfrente, Fateh al Sham cuenta con el apoyo de varios grupos aliados en una coalición apodada Tahrir al Sham.

En octubre, Fateh al Sham anunció haber integrado a Jund al Aqsa en su seno, pero, poco después, cambió de opinión y expulsó al grupo de sus filas.

En enero, Fateh al Sham afrontó a otros grupos rebeldes durante 10 días en Idlib en unos combates que dejaron decenas de combatientes muertos.

Esos enfrentamientos reflejan las crecientes tensiones entre diversas facciones de la provincia que, hasta hace poco, luchaban juntas contra las fuerzas del régimen de Bashar al Asad.

El conflicto sirio, desencadenado en 2011 por la sangrienta represión de manifestaciones pacíficas en el país, se transformó en una compleja guerra que implica a numerosas potencias regionales e internacionales, así como a varios grupos yihadistas.

Desde su inicio ha causado más de 310.000 muertos y la huida de más de 10 millones de personas.