Aunque 2019 estuvo marcado por manifestaciones en distintos puntos del planeta, la pandemia del coronavirus detuvo o al menos pausó gran parte de las protestas que se registraban en el mundo, incluso Chile donde las movilizaciones se extendieron desde octubre pasado hasta marzo, cuando el Covid-19 obligó a detener las reuniones masivas.

También fue el caso de Hong Kong, Ecuador, Argelia o los chalecos amarillos de Francia, pero hay zonas donde las protestas han continuado, como es el caso del Líbano, donde pese a que el gobierno ha declarado cuarentena, las personas han mantenido las protestas.

Pero con un agregado, las movilizaciones también se basan en el rechazo a las medidas de restricción para controlar la propagación del Covid-19, especialmente en la ciudad norteña de Trípoli, una de las pobres del país y donde el 80% de los adultos está sin trabajo, consigna el periódico español La Razón.

Entre las motivaciones por las que cientos de personas se reúnen cada día en las calles de Trípoli, se encuentra la molestia con las terribles condiciones de vida, la crisis económica, la falta de empleo, la corrupción y la rápida devaluación de la libra libanesa. Muchas causas que se agravaron con la crisis ocasionada por el coronavirus.

Imágenes captadas por la fotógrafa chilena Angélica Tarraga muestran el descontento generalizado de la población y las violentas protestas
que se suceden en las calles de Trípolil como quemas de neumáticos, ataques a bancos y bloqueos de caminos.

Además, Líbano tiene el mayor número de refugiados sirios en el mundo con 1,5 millones, los que en su gran mayoría viven bajo el umbral de la pobreza extrema, por lo que pidió colaboración a la Agencia para Refugiados de la ONU (Acnur, según sus siglas en inglés).

Por su parte, la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) advirtió que la escasez de alimentos comenzará en los próximos meses en el Líbano, con una hambruna pronosticada que afectará tanto a los refugiados como a casi 4 millones de libaneses que todavía están en su país.

En Líbano se han reportado oficialmente 859 casos de la enfermedad Covid-19, 26 de ellos mortales. El país inició un desconfinamiento pero en los últimos días el número de casos reportados diariamente ha vuelto a aumentar.

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