Lourdes León o Lourdes María León Ciccone, como la bautizó su madre, fue famosa incluso antes de nacer, considerando que su madre es la reina del pop, Madonna.

La joven ha estado en el espectáculo desde su concepción, sin embargo recién a sus 24 años ha decidido mantener una vida pública con un perfil de Instagram que muestra un poco más de su vida y sobre todo de su carrera.

Vinculada desde pequeña al arte, fue directora creativa de una marca cuando tenía 13 años, pero el baile es su real pasión, lo que ha demostrado más de una vez trabajando con privilegiadas casas de moda, las que han gozado de los pasos de Lourdes.

Parece que sacó algo más que el parecido físico de su madre, puesto que con su baile ha logrado colaborar con importantes marcas y se posiciona como la más popular de las “It Girls” del momento, aunque es muy claro que es mucho más que eso o la hija de Madonna.

Lourdes León, una provocadora

Es imposible hablar de Lourdes sin referirse a su madre, quien en diciembre de 1996 brillaba de felicidad anunciando con Oprah Winfrey su embarazo, fruto de la relación con el actor y preparador físico cubano Carlos León. “Me quedé en shock cuando me di cuenta de que iba a tener las dos cosas que más deseaba al mismo tiempo” señaló en ese entonces, tal como recoge S Moda.

La segunda cosa a la que se refería era al estreno de su ambicionada adaptación del musical Evita, que venía con la marraqueta bajo el brazo ya que la pequeña “Lola” llegaba al mundo en medio de la atención mediática que sólo lograba Madonna.

Aunque de niña, su madre protegió su vida privada celosamente, tuvo una esporádica aparición en el espectáculo cuando tenía solo 7 años.

Lola fue una de las niñas que repartía flores, al comienzo del espectáculo que protagonizó Madonna junto a Britney Spears y Cristina Aguilera en los famosos VMA Awards de 2003, donde la reina del pop besó a la princesa del pop, causando una revolución a nivel mundial (y a un Justin Timberlake descompuesto).

Cuando ya comenzaba su adolescencia, la pequeña Lourdes se abría paso en el mundo de la moda siendo la directora creativa de Material Girl, la línea de moda dirigida a adolescentes que fundó su madre.

Con Taylor Momsen, la estrella de Gossip Girl y vocalista de The Pretty Reckless, como rostro de la marca, madre e hija afianzaban su relación entorno al nuevo negocio.

Aunque uno de sus ganchos fue un video lanzado en el canal de Youtube de la cantante, donde buscaban a la “estrella de la suerte”, es decir, un rostro para su marca que contemplaba anuncios en tiendas, web e incluso, una pantalla en Times Square en Nueva York, destacaba Rolling Stone.

Desde ese momento, la pequeña Lourdes comenzó una vida ligeramente más pública, siempre acompañada de su madre, con quien no siempre tuvo una gran relación.

Lola, la niña creció

Se perfilaba como una de las “It Girl” del momento, sin embargo, Lourdes León hizo el camino largo. Trabajó durante algunas giras internacionales de su madre, siendo parte del departamento de vestuario, para luego matricularse en la universidad.

Estudió en LaGuardia HS of Music & Art and Performing Arts, un privilegiado colegio del Upper East Side de Nueva York, donde asistieron otras estrellas como Jennifer Aniston, Adrien Brody, Al Pacino, Sarah Paulson o Awkwafina.

Aquí fue donde también conoció a su novio de la adolescencia, el protagonista de “Call me by your name” Timothée Chalamet, cuando este aún no tenía la fama de la que goza actualmente.

Según destacó Glamour, el actor fue el primer “novio serio”, algo que ella confirmó señalando: “Le tengo un gran respeto. Hubo algo entre nosotros”.

Luego de su paso por la exigente escuela, fue la Universidad de Michigan, donde cursó artes escénicas por cuatro años, lo que generó profundo orgullo en su madre. “Es una locura el talento que tiene. Me muero de la envidia porque ella es increíble en todo lo que hace: es una genial bailarina, una estupenda actriz, toca el piano de una forma preciosa… tiene mucho más talento que yo”, dijo en Vogue.

Cuando se fue a estudiar tenía sólo 16 años y prefirió vivir en los dormitorios de la universidad, lejos de las estrictas reglas de su madre, con el objetivo de comenzar una carrera alejada de su madre.

Según destacó ABC, Madonna no aprobaba que su hija fumara o gastara en exceso su tarjeta de crédito, por lo que el padre de la bailarina, Carlos León, tuvo que mediar entre las dos.

Sin embargo, eso no fue más que un momento en la relación de madre e hija, puesto que la joven ha mantenido una excelente comunicación con su madre, pese a que también ha querido desmarcarse del ser “la hija de”.

En ese sentido, la cantante señaló “Tengo la sensación de que las redes sociales le atormentan y que la hacen pensar que las cosas que consiga vendrán porque yo soy su madre. Intento ponerle el ejemplo de otras hijas de famosos como Zoe Kravitz, que también tuvo que pasar por esa fase de ‘ah, tú eres hija de…’ y luego fueron tomadas en serio. Solo tiene que seguir trabajando e intentándolo”.

Lourdes, forjando un camino más allá de ser la primogénita de Madonna

Lola lleva muchos años trabajando para diversas marcas, un ejemplo fue la colaboración que realizó con otra hija de los “royal” de la música, Stella McCartney.

La diseñadora señaló respecto “Es independiente, inspiradora y un espíritu libre y joven. A pesar de haber nacido bajo los focos, siempre se ha mantenido con los pies en la tierra”.

La joven ha comenzado un camino como artista en la moda, mucho más allá de su conexión con su famosa madre. Lola, comenzó a unirse a la vida pública a través de su cuenta de Instagram, la que recién abrió a principios de este año.

Esta apertura no fue con tranquilidad, sino que la utilizó para mostrar su trabajo para firmas como Juicy Couture o Marc Jacobs, destacó Vanity Fair.

Pero el escándalo no vino de las provocadoras imágenes que publicó, sino de las respuestas que dio ante los comentarios que hicieron sus seguidores sobre estas fotos.

La joven contestó de forma brusca a quienes comentaban haciendo alusión a su madre o la insultaban: “Mi debut musical será cantar en tu funeral” o “No tienes vida” fueron las palabras que Lourdes le dedicó a sus nuevos seguidores en una muy franca llegada a las redes sociales.

Sin embargo, ha continuado utilizando la plataforma para promocionar su trabajo, ya que si bien mantuvo un bajo perfil cuando protagonizó campañas como la de Miu Miu en 2019, posando con elegancia para el lente de David Sims mientras llevaba una melena con flequillo estilo pixie, una diadema y se enfundada en un conjunto negro y zapatos rojos, ahora Lola ha explotado su lado más sensual.

Comenzó con su imagen para Juicy Couture, pero también mostró sus dotes como bailarina en videos que alaban la colaboración con Stella McCartney y Adidas.

Aunque no ha publicado tantas imágenes, siempre tienen relación con su trabajo. Lo último, su colaboración con la marca del mexicano Víctor Barragán, donde mostró el enorme tatuaje que posee en la espalda y la parte trasera de su cuerpo con una tanga rosa y un vestido morado con flecos, consignó Vogue.

Además, protagonizó una película de corte suspenso erótico para la marca del mexicano, donde la fotógrafa y directora Maya Toledano la sigue mientras va cambiando a atrevidos looks que incluyen una chaqueta de mezclilla con una peluca rubia marcada con el logo de Barragán. La colaboración muestra el lado más sensual de Lola, quien también trabajó para Desigual.

De esta forma, Lourdes se abre un camino propio en el mundo de la moda, alejada de la fama de su madre, pero muy consciente de su papel como artista que no se limita sólo al modelaje, sino que también al baile.

Es por esto que seguramente seguiremos conociendo mucho más de esta chica, que no ha dudado en tener un estilo muy parecido al de su madre en la juventud, cuando rompía los cánones de comportamiento causando sensación en los 80, algo que su primogénita, quien no tiene miedo a posar con vello en las axilas o utilizar provocadoras prendas, podría hacer sin ningún inconveniente, esté bajo el alero de la famosa Madonna, o no.