La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) anunció, este miércoles, el cierre temporal de 49 pozos productivos de crudo, lo que según expertos y trabajadores es un claro giro a la extracción de gas natural.

Frente a la baja demanda de petróleo y su alta oferta a nivel mundial, los países de la OPEP, Arabia Saudita, Rusia, Qatar y Venezuela decidieron congelar la producción de crudo con el fin de estabilizar precios.

Este martes, el barril WTI cerró en 29 dólares con 10 centavos y el referencial europeo en 30,65 dólares. Bajas sostenidas que han impactado las economías del mundo, también la nacional y en particular las faenas de ENAP en Tierra del fuego.

Los 49 pozos productivos de crudo cerraron temporalmente por el alto costo que suponen esos trabajos, decisión que fue calificada por la empresa como una ‘reorganización’ del proceso productivo.

El giro supone una definición respecto de la explotación de gas natural no convencional en la región de Magallanes, según el economista Jorge Hermann.

Según un reciente estudio del Servicio Geológico de Estados Unidos, en Magallanes, la cuenca contaría con reservas de gas natural que aseguran el recurso para los próximos 70 años. De ahí que, para los trabajadores, la señal sea positiva.

Sin embargo, los trabajadores ponen en duda la adjudicación a 3 años de la empresa Petrex para investigaciones que, con la paralización de los pozos de crudo, se reducen.

Así lo dejó en claro el presidente del sindicato refineria Aconcagua de Concón, Nolberto Díaz.

A juicio de Díaz, ENAP se estaría aprovechando de este giro en la producción para privatizar y tercerizar funciones a través de una empresa que acusan, cerró contrato el 2012 por adjudicación directa a raíz de una emergencia operativa en Punta Arenas, pero llegando un año tarde.

Según la Empresa Nacional del Petróleo, los trabajadores de las faenas en Tierra del Fuego serán redestinados a otras funciones por lo que sus puestos de trabajo no están en peligro.