El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó este lunes que Washington y sus aliados han aumentado el volumen de sus ataques contra el grupo Estado Islámico, a quienes pasaron a golpear “más fuerte que nunca”.

Durante un discurso en el Pentágono, Obama dijo que aunque los “aliados” deben ser “incansables, también deben ser inteligentes, y atacar al EI con precisión quirúrgica”.

De acuerdo con Obama, las fuerzas terrestres están expulsando a los combatientes del EI “cuadra a cuadra, ciudad a ciudad. Los estamos golpeando más fuerte que nunca”.

En tanto, los ataques con aviones y drones han aumentado “hasta llegar ahora a los 9.000. En noviembre, arrojamos más bombas contra blancos del EI que en cualquier otro mes desde el inicio de esta campaña. Estamos eliminando a los líderes del EI, sus comandantes y sus asesinos, uno a uno”, expresó.

“En resumen, los líderes del EI no se pueden esconder y nuestro mensaje a ellos es simple: ustedes son los próximos”, amenazó.

Sin embargo, Obama admitió que los progresos en esas iniciativas militares deben “llegar más rápidamente”.

“Reconocemos que los progresos precisan llegar más rápidamente. Nadie lo sabe mejor que los incontables sirios e iraquíes que viven bajo el terror del EI”, dijo.

Por ello, para aumentar todavía más la presión y conseguir resultados, Obama anunció el viaje del secretario de Defensa, Ash Carter, “al Medio Oriente” para conseguir “más contribución militar para este combate”.

Obama también anunció que el secretario de Estado, John Kerry, viajará a Rusia el martes para mantener contactos diplomáticos “como parte del proceso para poner punto final a la guerra civil siria”.