Esta semana el cajero quemado vivo a finales de julio en una sucursal de Servipag ubicada en un supermercado de Hualpén entregaría su testimonio ante la Fiscalía.
Un aspecto determinante en la investigación por el brutal caso del cajero Pablo Ramírez Arias, es acreditar si los hermanos Montecinos Pinto, de 27 y 17 años, actualmente privados de libertad, son efectivamente y fuera de toda duda razonable los autores materiales del salvaje ataque, para lo cual el testimonio de la víctima es fundamental.
Ese esperado relato de los hechos podría cumplirse la próxima semana, comentó su hermana Sigrid.
El demencial episodio marcó tanto a Sigrid, que adoptó como propia la bandera de la lucha contra la delincuencia y por eso llegará este lunes a La Moneda, a las 12:30 horas, esperando que alguien la reciba para entregar una lista de diez puntos con medidas antidelincuencia.
La acompañarán el abogado Enrique Hernández y parlamentarios de diversos partidos políticos, porque es necesario que las autoridades entiendan que la comunidad, dijo, pide a gritos cambios al sistema.
Pablo Ramírez Arias se encuentra de regreso en la zona, recuperándose de las heridas sufridas la tarde del miércoles 29 de julio, cuando dos delincuentes lo quemaron para robar el dinero del local servipag que atendía, en Hualpén.
