La Corte de Casación italiana decidió que un niño nacido de una madre de alquiler en Ucrania no podrá permanecer con sus “padres” italianos y deberá ser adoptado por otra familia, informó el miércoles la prensa.

La Suprema Corte recordó que “la ley italiana prevé que la mujer que da a luz es la madre y que la misma ley contiene una prohibición formal, reforzada por una sanción penal, de la gestación para otra persona”, indicó el diario La Stampa.

Se trata del caso de una pareja italiana estéril de unos 50 años, que vive en el norte del país, y que deseaba a toda costa tener un hijo. Después de ser rechazados en tres ocasiones por las autoridades competentes para adoptar a un niño en Italia se dirigieron a Ucrania, donde encontraron una madre de alquiler.

La pareja pagó 25.000 euros, según La Stampa, y cuando el bebé nació en Ucrania en 2011 su madre biológica se negó a escribir su propio nombre en su certificado de nacimiento.

Actualmente la criatura, un varón, “no es hijo de nadie”, resume el periódico, pues su madre biológica desapareció y sus padres adoptivos cometieron un delito para la ley italiana y deben perder la tutela del pequeño.

La fiscalía de la Casación pidió infructuosamente a los jueces supremos que dejasen a la pareja la tutela del niño, agregó La Stampa.