El presidente de México, Enrique Peña Nieto, admitió este sábado que “prácticamente no hay esperanza” de encontrar con vida a las 68 personas desaparecidas tras un gran alud que sepultó parcialmente una comunidad del sur del país tras dos devastadoras tormentas.

“A día de hoy prácticamente no hay esperanza ya de que pueda realmente encontrarse alguna persona con vida” en La Pintada, dijo el presidente durante una rueda de prensa junto a parte de su gabinete desde el estado de Guerrero, donde se encuentra esa comunidad montañosa, y el más afectado por el efecto cruzado de dos ciclones que ya se disiparon.

“La cantidad de tierra que prácticamente sepultó más de 40 casas de esta comunidad deja pensar (que es difícil) que se pueda encontrar gente con vida”, agregó el mandatario, que esta tarde visitó junto a otros funcionarios la montañosa comunidad donde las autoridades habían reportado al menos dos personas muertas y 68 desaparecidos.

Elementos de Protección Civil y del Ejército seguían escarbando este sábado a fuerza de picos y palas las montañas de lodo que sepultaron la mitad de La Pintada en busca de víctimas.

El lunes en la tarde y fruto de las fuertes tormentas, se produjo un gigantesco deslave en esta aislada comunidad cafetalera de 400 habitantes, cuyo acceso por tierra se dificultó por los múltiples aludes en su sinuosa carretera, haciendo que los equipos de rescate apenas pudieran iniciar su trabajo en el terreno el jueves.

Los disipados ciclones Manuel e Ingrid, que llegaron a alcanzar la categoría de huracán 1, golpearon de forma casi simultánea las dos costas de México desde el fin de semana en un fenómeno que no ocurría desde hace 55 años y que, según el último reporte oficial, habría dejado ya 101 muertos además de los 68 desaparecidos de La Pintada.

Con los remanentes de ambas tormentas ya disipándose, México enfrenta ahora al multimillonario reto de reconstrucción de poblaciones y carreteras en todo el país, que en agosto revisó a la baja la proyección del crecimiento económico para este año de 3,1% a 1,8%.

“Estamos ya entrando en la etapa de reconstrucción”, señaló Peña Nieto al resaltar que el cruce de los dos ciclones fueron un evento extraordinario que provocaron “las lluvias más intensas que se han extendido” en México.