La cámara baja del parlamento ruso aprobó este viernes en tercera y última lectura una ley que prohíbe a los estadounidenses adoptar niños rusos y prevé la elaboración de una “lista negra” sobre los extranjeros indeseables en Rusia.

Aprobado por los diputados con 420 votos a favor, 7 en contra y una abstención, el texto es una respuesta a la promulgación de la lista “Magnitski” en Estados Unidos, que sanciona a los responsables rusos que hayan violado los derechos humanos.

El texto, que todavía tiene que ser aprobado por el Consejo de la Federación y promulgado por el presidente Vladimir Putin, lleva el nombre de Dima Iakovlev, un niño ruso fallecido en Estados Unidos en 2008 después de que su madre adoptiva estadounidense lo olvidara en un coche en plena ola de calor.

Durante los últimos años los medios de comunicación rusos se hicieron eco de varios casos de maltrato de niños por sus padres adoptivos en Estados Unidos.

La propuesta de ley suscitó numerosas reacciones de reprobación en Rusia, incluso entre ministros, como el de Educación Dimitri Livanov y el de Relaciones Exteriores, Serguei Lavrov.

Pero el presidente Vladimir Putin la considera “apropiada” frente a la adopción en Washington de la “lista Magnitski” que califica de “acto no amistoso”.

El presidente estadounidense, Barack Obama, promulgó el viernes pasado la “ley Magnitski” que prohíbe la entrada en Estados Unidos de responsables rusos implicados en la muerte en la cárcel en 2009 en Moscú del jurista ruso Serguei Magnitski o en otras violaciones de los derechos humanos. También prevé confiscar sus bienes.

Magnitski murió en prisión preventiva, víctima de actos violentos y privado de atención médica. Había sido detenido un año antes después de haber denunciado un gigantesco escándalo financiero urdido por miembros del ministerio del Interior ruso.