El vicepresidente estadounidense Joe Biden insistió este viernes ante el primer ministro iraquí Nouri al-Maliki para que su gobierno impida el tránsito de armas en su territorio hacia Siria, anunció la Casa Blanca, al término de una conversación telefónica entre ambos dirigentes.

En esta conversación “el vicepresidente y el primer ministro evocaron los temas relacionados con la seguridad en la región, entre ellos la necesidad de impedir que ningún Estado aproveche el territorio o el espacio aéreo iraquí para enviar armas a Siria”, precisó el ejecutivo estadounidense en un comunicado en el que no se nombra a Irán, país considerado como uno de los que realizarían ese tráfico.

Más temprano, Washington había indicado que no planea supeditar su ayuda a Irak a sus reiterados llamados para que Bagdad inspeccione los aviones iraníes que sobrevuelan su territorio y que son sospechosos de transportar armamento para el régimen sirio.

“No queremos relacionar la asistencia estadounidense a Irak con el tema de los vuelos iraníes precisamente porque nuestra asistencia se dirige, en parte, a robustecer la seguridad, incluyendo ayudar a los iraquíes a construir su capacidad para defender su espacio aéreo”, dijo la portavoz del departamento de Estado, Victoria Nuland.

Washington pidió repetidas veces a su aliado iraquí que haga aterrizar y registre todos los aviones iraníes que sobrevuelan su espacio aéreo con destino a Siria.

Teherán, fiel aliado de Damasco, aseguró al primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, que sus aeronaves transportan ayuda humanitaria hacia Siria, donde una revuelta popular trata desde marzo de 2011 de derrocar al presidente Bashar al Asad.