Grupos independentistas del País Vasco manifestaron este sábado en Bilbao, en el norte de España, para exigir la puesta en libertad de los presos de ETA gravemente enfermos, en una concentración convocada a última hora tras la prohibición por la justicia de otra similar.

Bajo la vigilancia de la policía y sin incidentes, más de mil personas se congregaron al mediodía en la plaza Euskadi de Bilbao para exigir la liberación de Iosu Uribetxebarria, afectado de un cáncer terminal, y otros 13 reclusos de ETA enfermos.

Bajo el lema “Es tiempo de soluciones, libertad para los presos enfermos”, la protesta había sido convocada el viernes por grupos independentistas horas después de que un juez prohibiese una marcha organizada por Herrira, plataforma de apoyo a los presos de ETAk, en solidaridad con Uribetxebarria.

Condenado en 1998 a 32 años de cárcel por el secuestro de un funcionario de prisiones que estuvo retenido 532 días, Uribetxebarria padece un cáncer incurable y está en huelga de hambre desde hace casi dos semanas para pedir su liberación.

Enzarzados en un pulso con el gobierno español, muchos de los cerca de 700 presos de ETA encarcelados en España y Francia secundaron esta protesta con acciones que incluyeron huelgas hambre de hasta más de 200 en un mismo día.

La justicia española había prohibido la primera manifestación por considerar que podía constituir “un delito de enaltecimiento y justificación pública del terrorismo”.

Asegurando que “existen numerosas coincidencias entre esta convocatoria y la prohibida ayer”, la Asociación de Víctimas del Terrorismo solicitó el sábado un nuevo veto de la justicia, que no se produjo por falta de tiempo.

El ministerio del Interior español otorgó el viernes el tercer grado penitenciario a Uribetxebarria, habilitándolo a obtener una libertad condicional sobre la que el juez debe pronunciarse la próxima semana.

Responsable de la muerte de 829 personas en más de 40 años de atentados por la independencia del País Vasco, ETA anunció el 20 de octubre “el cese definitivo de su actividad armada”, pero sin entregar las armas ni disolverse.