Las “organizaciones terroristas” podrían imponerse en Siria si el régimen del presidente Bashar Al Asad cayera, advirtió este miércoles un alto responsable del ministerio ruso de Relaciones Exteriores citado por la agencia Interfax.
“Si el gobierno no puede mantenerse en el poder, hay grandes posibilidades de que, en el país, los radicales y los representantes de organizaciones terroristas se fortalezcan”, declaró Ilia Rogachev, director del “departamento de nuevas amenazas” del ministerio.
Rogachev habló en la Universidad de San Petersburgo acerca de la cooperación antiterrorista.
Rusia, aliada de Siria, rechaza votar una resolución en la ONU condenando al régimen de Damasco por la represión de un movimiento de contestación sin precedentes en el país.
El presidente ruso Dimitri Medvedev ya había estimado que en el seno de la oposición siria había “extremistas” y “terroristas”.
Por otra parte, Rogachev declaró el miércoles que Rusia había “advertido” a los Estados europeos sobre la situación en Libia.
Moscú estima que la amenaza terrorista se refuerza y que probablemente ya hay armas que fueron a parar a manos de Al Qaida con la caída del régimen de Muamar Gadafi.
Si bien Rusia se pronunció en favor de la salida del coronel Gadafi y permitió con su abstención que el Consejo de Seguridad autorizara los bombardeos de la OTAN en Libia, considera que la Alianza Atlántica fue más allá del mandato acordado por las Naciones Unidas.
Moscú destaca que no quiere una resolución en el Consejo de Seguridad condenando a Siria para impedir que se repita lo de Libia. Rusia es partidaria de un texto que llame al régimen sirio y a la oposición a negociar una solución de la crisis, sin condenar la represión.
