Varias ciudades de México afectadas por la violencia del narcotráfico extremarán la seguridad por los festejos del jueves y viernes del aniversario 201 de la Independencia luego de recientes ataques contra población civil, informaron este miércoles las autoridades.

En Monterrey, tercera ciudad del país y capital del industrial estado de Nuevo Léon, se cancelaron los vistosos fuegos pirotécnicos en señal de luto por los 52 muertos el 25 de agosto en el incendio de un casino atribuido al cartel de Los Zetas.

Cerca de la medianoche del 15 de septiembre, en las plazas públicas de todo el país se reúnen multitudes para dar el “Grito de Independencia”, rememorando el momento en que el sacerdote Miguel Hidalgo echó al vuelo en 1810 las campanas de la iglesia de Dolores, en Guanajuato (centro), para llamar a la insurgencia.

El 16 de septiembre, las principales ciudades serán escenario de desfiles militares y policiales. En Ciudad de México se prevé que unos 8.000 militares participen en el recorrido.

Aunque habitualmente los festejos han transcurrido sin incidentes mayores, en 2008 se vieron empañados por una granada lanzada contra la multitud en Morelia, capital de Michoacán (oeste), que mató ocho personas en un ataque atribuido al cartel de La Familia.

En Monterrey las celebraciones estarán “blindadas con 1.396 elementos del Ejército y policías federales y estatales”, informó el vocero de seguridad del estado Jorge Domene.

En Morelia y otras localidades de Michoacán, como Uruapan y Zitácuaro, la policía reforzó su despliegue ante el temor de acciones del cartel de La Familia y el grupo criminal Los Caballeros Templarios.

En el estado de Veracruz (este), donde Los Zetas han multiplicado sus acciones este año, al menos cuatro localidades anticiparon que cancelaran las concentraciones masivas y en la capital Xalapa se desplegaron vehículos policiales pesados para ser usados como protección ante eventualidades.

La violencia ligada al tráfico de drogas ha dejado en México más de 41.000 muertos desde diciembre de 2006, cuando el presidente Felipe Calderón lanzó un operativo antidrogas en el que participan más de 50.000 militares.