El ex dictador haitiano Jean-Claude ‘Baby Doc’ Duvalier negó el miércoles que tuviera intenciones de intervenir en el proceso electoral en curso, desmintiendo informaciones difundidas por sus allegados acerca de que planeaba regresar al poder.

“Desmiento en los términos más enérgicos todas las declaraciones políticas reportadas por la prensa nacional o internacional que pudieron haber sido atribuidas a mí por alguien que dijo ser un portavoz y que pudieron haber aludido a escenarios acerca del proceso electoral de Haití”, dijo Duvalier en un comunicado transmitido a la AFP por su compañera Véronique Roy.

La declaración no descartó un posible papel político para el ex hombre fuerte haitiano, quien regresó sorpresivamente a su país el domingo pasado, 25 años después de ser derrocado por una revuelta popular.

Duvalier pareció en cambio tomar distancia de los comentarios formulados por Henry Robert Sterlin, un ex embajador haitiano en Francia, quien dijo que Duvalier había vuelto para ser electo como el próximo presidente.

“Necesitamos hacer todo para que las elecciones sean anuladas y se realicen nuevas elecciones en las que Duvalier pueda presentarse”, había dicho más temprano Sterlin a la AFP.

Después, “¡bingo!’”, sería reelegido, agregó Sterlin, quien se presentó a sí mismo como portavoz de Duvalier.

“Se quedará en Haití para siempre, es su país. Y participará en política. Es su derecho. Un político nunca muere”, aseguró por su lado a la AFP Reynold Georges, uno de los abogados de Duvalier.

La Organización de Estados Americanos (OEA) dijo que la primera vuelta de los comicios para elegir sucesor del presidente René Préval, celebrados el 28 de noviembre, estuvo minada por irregularidades y fraude.

La OEA recomendó en un informe que el candidato oficialista Jude Célestin se retire de la carrera en beneficio de Michel Martelly, para que dispute la segunda vuelta con la ex primera dama Mirlande Manigat.

El ex embajador Sterlin presentó una segunda hipótesis sugiriendo que Martelly podría ser reelecto. “Si Préval mantiene a Célestin en la segunda vuelta, el país va a entrar en llamas”, advirtió. Por eso Préval se verá obligado a “aceptar la vuelta de Martelly al proceso electoral”.

“Si hay una segunda vuelta, entonces Martelly podría acceder al poder”, anticipó Sterlin, y añadió que el bando de Duvalier “no tenía problemas con el señor Martelly”.

El regreso de ‘Baby Doc’ a Haití causó una gran sorpresa, tras 25 años de exilio en Francia, cuando el país intenta recuperarse del terremoto de enero de 2010 que dejó más de 225.000 muertos y está sumido en una crisis política desencadenada tras la primera vuelta de las elecciones.

El martes fue llevado ante la Justicia, donde se lo acusa de corrupción y de desviar fondos públicos durante su gobierno de mano dura, que asumió con 19 años en 1971 tras la muerte de su padre, François ‘Papa Doc’ Duvalier, fallecido ese año.

Como su progenitor, ‘Baby Doc’ se deshizo de la oposición, ordenó medidas drásticas contra los disidentes y se embolsó parte de los fondos del Estado más pobre de América.

La policía secreta leal a la familia Duvalier, conocida como los ‘Tonton Macoutes’, está acusada de haber secuestrado, torturado y ejecutado a más de 30.000 opositores durante las décadas de 1960 y 1970.

Georges acusó a Préval de ser el responsable de las acusaciones de corrupción contra su cliente.

“Los hechos han prescrito. No podemos volver a estas cosas, está defendido por la ley. Esto es persecución”, afirmó el abogado.

El miércoles, cuatro haitianos demandaron al ex dictador por presunta tortura, exilio forzado y detención arbitraria durante sus 15 años en el poder, dijo la periodista Michèle Montas, ex portavoz de la ONU.

Duvalier es considerado por organizaciones internacionales de defensa de los derechos humanos culpable de la muerte de miles de opositores.

En otro giro potencial, el ex presidente haitiano Jean-Bertrand Aristide, derrocado en 2004 y en la actualidad reside en Sudáfrica, dijo que él también está dispuesto a regresar a Haití en cualquier momento.