La Autoridad Sanitaria posee un registro de 134 farmacias autorizadas en la Región del Maule. El terremoto y tsunami del 27/F afectó al 50% de ellas, las que debieron reinstalarse en nuevos locales. Fue un proceso complejo, pues para hacerlo deben contar con la aprobación de la Unidad de Prestadores de la Secretaría Ministerial de Salud, entre otras, autorizaciones.

Siguiendo el plan anual de fiscalización en esta área, la Seremi de Salud ha acentuado las inspecciones en horario nocturno y durante los fines de semana, constatando graves infracciones al reglamento que regula la actividad farmacéutica.

Uno de los requisitos para el funcionamiento de toda farmacia es la presencia permanente de un profesional Químico-Farmacéutico, el que debe supervisar a los auxiliares de farmacia y resolver las dudas de los clientes, entre otras labores propias de su profesión. Otra obligación de este tipo de locales es informar al público acerca de todas las farmacias de turno, de manera que quienes lo requieran, sepan dónde pueden adquirir sus medicamentos.

Las fiscalizaciones realizadas entre el 15 de octubre y el 5 de noviembre arrojaron 24 farmacias sumariadas por infracciones de diverso tipo. Dieciocho de ellas por no contar con información de los locales de turno al público, cinco por no disponer de Químico-Farmacéutico y una por cerrar antes del horario informado.

La encargada de la Unidad de Prestadores de la Seremi de Salud, Francia Campos, manifestó que “la mayor parte de estas infracciones se producen los fines de semana o en horario nocturno, por lo que nos mantendremos vigilantes para hacer cumplir el reglamento de farmacias, que busca asegurar un buen servicio al cliente, en una actividad tan delicada como es la comercialización de medicamentos”.