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El diputado democratacristiano Pablo Lorenzini manifestó este lunes estar preocupado debido a que las pensiones no, por primera vez en la historia, no tendrán reajuste.

Ello, tras conocerse los indicadores del Informe de Política Monetaria (Ipom) entregado por el Banco Central, que señala que las cifras de inflación subirán recién durante el primer semestre del próximo año.

El parlamentario agregó que “todos recibieron algún tipo de arreglo, incluyendo a los empleados públicos, con un reajuste del 4,5 %. No puede ser que no se haga nada frente a la situación de los pensionados, son los que tienen más gastos y tendrán que enfrentar las alzas de precios del próximo año sin ningún tipo de reajuste”.

Por lo anterior, Lorenzini informó que ha realizado diversas gestiones con las autoridades económicas, esperando respuesta positiva.

“Entre las propuestas, la Superintendencia de Pensiones, en uso de sus atribuciones legales, podría interpretar el D.L. 3.500, que regula el sistema previsional administrado por las AFP, precisando que la inflación negativa no debiera implicar una disminución en el monto de las jubilaciones.”

El diputado manifestó además que el mismo D.L. 3500 dispone un mecanismo de reajustabilidad que implica no disminuir el valor cuando la inflación es negativa, respecto de la determinación del límite máximo imponible de 60 U.F., criterio que a su juicio debería extenderse a las pensiones expresadas en dicho índice.

Lorenzini rechazó las explicaciones de quienes aseguran que la baja en inflación aumente el poder adquisitivo de las pensiones, señalando que “los pensionados tienen muchos gastos fijos, especialmente en salud, gastos que no varían según la Unidad de Fomento, sino que registran permanente alzas. Y si a esto le agregamos que la mayoría de las pensiones son muy bajas, no contar con reajuste es aún un castigo mayor”.