Profesores del Instituto Nacional por clases mixtas: "Significa un aprendizaje poco significativo"

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Un complejo inicio de segundo semestre ha experimentado el Instituto Nacional, esto tras registrarse una serie de hechos violentos en las dependencias y las inmediaciones del recinto educativo. Incluso se tuvo que tomar la drástica medida de implementar un sistema mixto de clases, tal cual fue durante en la pandemia.

Para profundizar más de la situación conversamos con Katia Alarcón, la vicepresidenta del Gremio de profesores del Instituto Nacional, quien destaca la importancia de la presencialidad en el proceso educativo del alumnado. “Si accedimos a la modalidad mixta es por que queremos colaborar a la seguridad y por nuestro compromiso con la educación pública”.

“Como profesores estamos en desacuerdo de la implementación de las clases virtuales, solo acordamos en un contexto de emergencia sanitaria y no de violencia y destrucción constante. Fue una propuesta de Dirección como una medida para resguardar a la comunidad”, destacó.

Clases virtuales y brecha educativa

La docente de lengua y literatura, hace especial énfasis en la desigualdad educativa que se evidenció en la pandemia con las clases online, asegurando que: “Entendemos que significa un aprendizaje poco significativo para los estudiantes. No es posible guiarlos y genera una brecha respecto a los estudiantes a nivel nacional”.

“En el Instituto tenemos pocos recursos, pocos computadores, pocos espacios y no hay wifi. No contamos con las herramientas para hacer estas clases óptimas a diferencia de otros colegios”, subrayó.

Pese a que el foco de incivilidades ha disminuido en los alrededores, la profesora se mantiene fiel a su postura indicando que: “Afecta nuestras condiciones laborales como trabajadores de la educación y vulnera el derecho de los estudiantes de recibir un aprendizaje optimo”.

Llamado a las autoridades

No obstante, Alarcón asegura estar consciente del ambiente de inseguridad que se vive dentro del establecimiento, por lo que hace un llamado urgente a las autoridades tanto del Gobierno como del municipio capitalino. “Estamos inseguros en este espacio y queremos que las autoridades se hagan cargo por que son ellos los que les concierne darnos solución a toda la comunidad y a otros colegios de Santiago”.

“Estamos hablando de un nivel de violencia extrema y no exageramos. La semana pasada decidimos paralizar las actividades académicas ante el nulo actuar de las autoridades. Hago el llamado a la alcaldesa a que se acerque a las comunidades educativas”, finalizó.

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Un complejo inicio de segundo semestre ha experimentado el Instituto Nacional, esto tras registrarse una serie de hechos violentos en las dependencias y las inmediaciones del recinto educativo. Incluso se tuvo que tomar la drástica medida de implementar un sistema mixto de clases, tal cual fue durante en la pandemia.

Para profundizar más de la situación conversamos con Katia Alarcón, la vicepresidenta del Gremio de profesores del Instituto Nacional, quien destaca la importancia de la presencialidad en el proceso educativo del alumnado. “Si accedimos a la modalidad mixta es por que queremos colaborar a la seguridad y por nuestro compromiso con la educación pública”.

“Como profesores estamos en desacuerdo de la implementación de las clases virtuales, solo acordamos en un contexto de emergencia sanitaria y no de violencia y destrucción constante. Fue una propuesta de Dirección como una medida para resguardar a la comunidad”, destacó.

Clases virtuales y brecha educativa

La docente de lengua y literatura, hace especial énfasis en la desigualdad educativa que se evidenció en la pandemia con las clases online, asegurando que: “Entendemos que significa un aprendizaje poco significativo para los estudiantes. No es posible guiarlos y genera una brecha respecto a los estudiantes a nivel nacional”.

“En el Instituto tenemos pocos recursos, pocos computadores, pocos espacios y no hay wifi. No contamos con las herramientas para hacer estas clases óptimas a diferencia de otros colegios”, subrayó.

Pese a que el foco de incivilidades ha disminuido en los alrededores, la profesora se mantiene fiel a su postura indicando que: “Afecta nuestras condiciones laborales como trabajadores de la educación y vulnera el derecho de los estudiantes de recibir un aprendizaje optimo”.

Llamado a las autoridades

No obstante, Alarcón asegura estar consciente del ambiente de inseguridad que se vive dentro del establecimiento, por lo que hace un llamado urgente a las autoridades tanto del Gobierno como del municipio capitalino. “Estamos inseguros en este espacio y queremos que las autoridades se hagan cargo por que son ellos los que les concierne darnos solución a toda la comunidad y a otros colegios de Santiago”.

“Estamos hablando de un nivel de violencia extrema y no exageramos. La semana pasada decidimos paralizar las actividades académicas ante el nulo actuar de las autoridades. Hago el llamado a la alcaldesa a que se acerque a las comunidades educativas”, finalizó.