Hace algunos días se dio a conocer que expertos hallaron y destruyeron el primer nido de avispas asiáticas, conocidas también como “Asesinas”, en el estado de Washington (EEUU). El estudio a este ‘enclave’ deja datos bastante abrumadores sobre esta especie.

Según detalló el diario The Guardian, analistas sostienen que en el lugar existían al menos 500 especies que estaban en distintas etapas de su desarrollo, aunque aquello no sería lo peor.

Esto debido a que también se confirmó que en ese nido habían 200 avispas reinas con capacidad de formar nuevas comunidades en los bosques, por lo que el peligro de expansión de la especie estaba latente.

Sin ir más lejos el entomólogo a cargo del programa de eliminación de las avispas orientales, Sven-Erik Spichiger, sostuvo en un comunicado que: “Llegamos justo a tiempo”.

No obstante, desde el propio programa estiman que la eliminación de aquel nido no significa que aquel insecto no haya migrado hacia otras locaciones, por lo que aquel estado debería seguir en alerta.

Asimismo, tampoco se descarta que otras reina hayan salido del lugar antes de que éste fuera destruida por agentes especializados.

Los primeros ejemplares fueron descubiertos a mediados de este año en el condado de Whatcom, cerca de la frontera de este país con Canadá. En ese entonces, se le identificó como la avispa asiática, la cual puede medir hasta cinco centímetros y destruye colmenas de abejas con sorprendente rapidez.

Luego de varios estudios, expertos lograron introducir chips de rastreo a algunos ejemplares, con el objetivo que estos los llevaran hasta sus nidos.

El primer resultado concreto se logró en octubre pasado, cuando una expedición logró dar con el primer conjunto de estas avispas, las cuales habrían llegado a Estados Unidos en barcos.

Estimaciones indican que por año estos insectos matan un total de 50 personas en Japón, aunque, según declaran, las cifras de muertes por picaduras de abejas y otras avispas son mayores.

Hay que señalar que la avispa asiática no suele acercarse a las personas, a menos que se sientan amenazada o perciba peligro hacia su nido.