Es sabido que El Salvador es uno de los primeros países en adoptar el bitcoin como moneda oficial y más de algún comentario ha causado en escépticos y creyentes de las criptomonedas.

El presidente de dicho país, Nayib Bukele, aparte de los bonos financieros que adeuda, propuso la idea de emitir bonos por mil millones de dólares respaldados en bitcoin, pero la guerra entre Rusia y Ucrania que trajo consigo una considerable volatilidad de la moneda digital, pospuso la emisión del instrumento de deuda innovador.

La intención era poder salvar al país de un default financiero, construir un BITCOIN CITY y un país con un único impuesto del IVA fijo de 10%, eximiendo de impuestos a la renta y otros más específicos que pudieran tener.

La situación ha sido desfavorable para el bitcoin en el último tiempo, ya que se ha deteriorado su valor a consecuencia de la guerra y las actuales incertidumbres económicas a nivel mundial.

A lo anterior se suma el actual risk-off que ocurrió los primeros días de mayo, generado como consecuencia de la huida de los inversionistas de las criptomonedas, lo que provocó un descenso en los valores al punto que la moneda que simula el movimiento del dólar (USDT) por primera vez dejó de tener una paridad de 1:1. Todos estos problemas han conllevado a que el bitcoin se desplome más de 30% en lo que va del año 2022.

Las bajas considerables de las criptomonedas han traído como principal problema para El Salvador que el equivalente a dólares del bitcoin ubicado en sus reservas disminuya considerablemente, al punto que la Reserva federal de EEUU (FED), equivalente al Banco Central de Chile, ha pronunciado la posibilidad que este país no pueda responder a sus deudas por no tener la suficiente equivalencia en dólares al bitcoin que posee actualmente en su poder.

En este contexto, Nayib Bukele ha logrado llevar a otro nivel el debate de las criptomonedas y la inquietud que se espera dejar en el lector es la siguiente: Criptomonedas ¿alternativa de dinero, inversión o meramente especulación financiera? Lo importante es determinar si el dinero ha dejado de tener el concepto de fiduciario y sea necesario volver al pasado cuando tenía un respaldo como el oro.

Francisco León, académico Escuela de Auditoría Universidad de Las Américas.