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Programas de candidaturas presidenciales y pobreza infantil: propuestas débiles ante total evidencia

26 agosto 2025 | 11:01

La propuesta para una nueva metodología para medir la pobreza es un gran aporte para visibilizar lo problemáticas que son hoy las experiencias cotidianas de niños y niñas y podrían, más bien, deberían, ser una hoja de ruta para los programas de quienes pretenden presidir el país para todos los chilenos, también para aquellos menores de edad que no votan y que son hoy la población más pobre.

En Chile, uno de cada tres niños crece en un hogar calificado como pobre. La nueva metodología recomendada por la Comisión Asesora Presidencial para la Actualización de la Medición de la Pobreza en Chile no trajo sorpresas: los más pequeños continúan siendo el grupo con más personas en situación de pobreza. Sin embargo, los niños no son los protagonistas de ninguno de los programas de los candidatos presidenciales.

Las recomendaciones de la comisión no sólo impactaron en el aumento del número de niños y niñas que vivirían en situación de pobreza, sino que también visibilizaron experiencias que les empobrecen la vida hoy, en su presente, y también en su futuro, impidiendo el desarrollo de sus capacidades, la participación social y el bienestar.

La propuesta de la comisión perfecciona el esquema de medición de la pobreza multidimensional aumentando el número de indicadores observados en cada una de las dimensiones y profundizando algunos de los existentes. Las modificaciones recomendadas permiten dar cuenta de lo que UNICEF midió en su último reporte estadístico: Chile presenta uno de los peores desempeños en bienestar infantil entre los países de la OCDE.

Educación parvularia

La metodología propuesta amplía el indicador ‘asistencia a clases’ a educación parvularia, dando cuenta de la importancia de la educación inicial en el desarrollo de logros futuros en distintos ámbitos. Distintas investigaciones han demostrado que niños y niñas que asisten al jardín infantil muestran mayores niveles de desarrollo cognitivo y de lenguaje, así como competencias sociales y capacidades motoras, y menores problemas de comportamiento.

La asistencia a la educación parvularia de un niño o niña no tiene que ver únicamente con recursos materiales del hogar para ello, teniendo en cuenta que los jardines infantiles JUNJI y de Fundación Integra son gratuitos para el 60% más pobre según el Registro Social de Hogares, y los jardines administrados por municipios u ONGs son gratuitos gracias al aporte estatal vía transferencia de fondos; sino que también con instituciones insuficientes, excluyentes o no accesibles. De esta manera, la pobreza que puede experimentar un niño o niña al no asistir al jardín infantil no depende solo del nivel de ingresos del hogar, sino que también de las características de la oferta pública.

Salud

En la dimensión ‘salud’ los nuevos aportes a la medición también informan de pobrezas actuales en el día a día de niños y niñas.

Por una parte, la ‘inseguridad alimentaria’ reemplaza la malnutrición como indicador en la dimensión ‘salud’, y por otra, se incorpora el concepto de alimentación saludable para modificar los componentes de la canasta básica.

Estos cambios, que no tienen incidencia mayor en la tasa de pobreza total, son importantes porque significan como pobreza y carencia de bienestar el problema de la obesidad de toda la población, incluida la infantil.

Según el Mapa Nutricional Junaeb 2023 aproximadamente el 50% de niños, niñas y adolescentes en Chile tienen sobrepeso y de ellos, el 23% se encuentra en la categoría de obeso. La obesidad no solo tiene consecuencias físicas, sino que también sociales y psicológicas. Entenderla como parte de los problemas asociados a la situación de pobreza contribuye a hacernos cargo del bienestar de niños y niñas en el presente, no solo en cuanto implique costos para el futuro.

Vivienda y entorno

Finalmente, en la dimensión ‘vivienda y entorno’, la nueva metodología suma el indicador de asequibilidad, lo que pareciera no tener que ver con niños y niñas y, sin embargo, los afecta especialmente.

La falta de asequibilidad considerada como destinar un porcentaje equivalente o mayor al 30% del gasto mensual del hogar al pago de arriendo y dividendo por la vivienda, contribuye al estrés parental o del cuidador del niño o niña, lo que está vinculado a patologías de ansiedad en NNA.

El estrés parental significa una constante alarma para el niño junto a una falta de apoyo y contención por parte de la figura adulta, que está sobrepasada con sus problemas.

Las investigaciones vinculan el estrés parental con estrés tóxico, por su continuidad en el tiempo, lo que puede tener consecuencias neurológicas y físicas duraderas en el niño, como afectaciones al sistema inmunitario, hipertensión y enfermedades cardiacas, y detonar reacciones rabiosas, dificultar el aprendizaje y buscar el aislamiento o conductas desafiantes.

La propuesta para una nueva metodología para medir la pobreza es un gran aporte para visibilizar lo problemáticas que son hoy las experiencias cotidianas de niños y niñas y podrían, más bien, deberían, ser una hoja de ruta para los programas de quienes pretenden presidir el país para todos los chilenos, también para aquellos menores de edad que no votan y que son hoy la población más pobre.