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El Niño vs La Niña: En qué se diferencian estos eventos climáticos y qué se pronostica para el 2023
Créditos: Pexels
Domingo 23 abril de 2023 | Publicado a las 06:58 · Actualizado a las 09:50
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Estamos acostumbrados a escucharlos cada año cuando se hacen los primeros pronósticos de temperaturas y precipitaciones. Se trata de La Niña y El Niño, dos manifestaciones de un fenómeno climático que sucede en el océano Pacífico, pero que afecta al planeta completo. ¿Sabes por qué se produce cada uno?
Recién en marzo pasado, los servicios climáticos confirmaron el fin del fenómeno de la triple La Niña, el que causó consecuencias en diferentes partes del planeta por 3 estaciones consecutivas, pero ¿cuál es la diferencia entre El Niño y la Niña, qué factores influyen en cada uno y qué dicen las predicciones para los próximos meses?
Su causa continúa siendo una incógnita para el mundo científico, sin embargo, se conoce cuáles son las variables climáticas que inciden en la llegada de cada uno. Con estos datos, los especialistas pueden predecir a cuál de los dos eventos nos podemos enfrentar en un futuro cercano.
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¿Qué es el Niño-Oscilación del Sur (ENOS) y por qué se produce?
El Niño-Oscilación del Sur (ENOS o ENSO en inglés), es un evento climático que ocurre cada ciertos años (cíclico, pero no periódico), que se origina en la zona occidental del Pacífico ecuatorial y que se puede manifestar de dos maneras completamente opuestas: como el fenómeno del Niño o de la Niña.
La aparición de cada uno, dependerá de la variación de ciertos factores meteorológicos en el mencionado lugar del Océano Pacífico, según la Organización Meteorológica Mundial (WMO en inglés). Sin embargo, sus consecuencias se manifiestan a lo largo y ancho de todo el mundo.
Por ejemplo, diferencias en la presión atmosférica en la zona, provoca una clase de viento que puede, o no, calentar en mayor o menor medida parte del mar. Si la temperatura sube sobre un punto, desencadenará una serie de efectos que inciden en el calor y la cantidad de lluvias en el planeta.
En general, el calentamiento y precipitaciones en el Pacífico oriental son consecuencias del fenómeno de El Niño y la otra fase de enfriamiento, de La Niña.
También puede suceder que las variaciones meteorológicas no sean tan drásticas y se produzca un periodo neutral en el que no haya existencia de ENOS, en ninguna de sus dos facetas.
¿Qué es y cómo se manifiesta el fenómeno de El Niño?
El fenómeno del Niño es un evento climático que ocurre cuando las temperaturas de la superficie del mar en la región central y oriental del Océano Pacífico (entre Ecuador y Nueva Guinea) se vuelven más cálidas de lo normal. En concreto, es la manifestación cálida del ENOS.
De acuerdo a la BBC, los científicos no están seguros de qué es exactamente lo que inicia el proceso. Pero sí hay certeza de que las condiciones de presión del aire en el Pacífico ecuatorial, afectan los llamados vientos alisios que empujan las aguas cálidas hacia el oeste, o sea, lejos de América.
“Sabemos que el viento es el detonante, pero hay distintas teorías sobre por qué ese viento se altera”, comentó al medio el especialista en oceanografía Luis Alfredo Icochea.
Si los vientos alisios se debilitan, se mueve menos agua del Pacífico hacia el este (América), por lo que la parte central y oriental se calienta más de lo habitual. Por consecuencia, también se calienta la atmósfera.
Los resultados climáticos del fenómeno del Niño pueden varían dependiendo de la zona. En la costa oeste de Sudamérica puede provocar fuertes lluvias e inundaciones, mientras que en otras partes, como Australia y el Sudeste Asiático, puede causar sequías y olas de calor.
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¿Qué es y cómo se manifiesta el fenómeno de La Niña?
Por el contrario, el fenómeno de la Niña es un evento climático que ocurre cuando las temperaturas de la superficie del mar en centro del Océano Pacífico se vuelven más frías de lo normal.
Conforme a National Geographic, en esta fase de ENOS, los vientos son más fuertes y mueven el agua caliente hacia el oeste (Asia). Así, desde el Pacífico que rodea al continente americano emerge agua fría desde lo profundo.
A raíz de lo anterior, el agua más cálida se mueve hacia el lado occidental, como Indonesia y Australia, donde puede haber mucha más lluvia de lo habitual, según Meteored.
En América del Norte, La Niña suele provocar períodos secos e inviernos fríos en el Atlántico, mientras que en la costa contraria son más cálidos. Al contrario, en América del Sur predominan condiciones más secas y frescas, sobre todo en lugares como Ecuador y Perú.
En el Caribe y en el noreste de Brasil las lluvias se vuelven abundantes y temporada de huracanes suele tener mayor actividad.
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¿Qué se pronostica para los próximos meses ¿La Niña o El Niño?
Acorde a lo informado por los Centros Mundiales de Producción de Predicciones a Largo Plazo de la Organización Meteorológica Mundial (OMM), hay una probabilidad del 90% de un escenario neutro con respecto al ENOS, entre marzo y mayo de 2023. O sea, sin fenómeno Del Niño o La Niña.
¿Pero qué pasará después? La probabilidad de que la neutralidad se mantenga conforme pasan los meses, va disminuyendo hasta un 60 % para julio.
Por el contrario, que se instaure el episodio de El Niño aumenta del 15% entre abril a junio y al 35% para mayo y julio, alcanzando el 55%, durante junio y agosto.
Vale consignar que por ahora, estas son meras predicciones y no existe la certeza de que vayan a cumplir. Tal como explicó anteriormente a BioBioChile el Dr. Martín Jacques, del Departamento de Geofísica de la Universidad de Concepción, “estamos ahora en el periodo del año que ha mostrado ser más complejo para proyectar condiciones futuras de ENOS, lo que se denomina una ‘barrera de predictibilidad’”.
