En el cónclave realizado en Cerro Castillo, el presidente Gabriel Boric pidió -a sus dos coaliciones- mayor unidad y disciplina parlamentaria, para enfrentar la agenda legislativa de seguridad que tramita el Congreso. En el oficialismo -principalmente en Apruebo Dignidad- se hizo una autocrítica por las "quitadas de piso" al Ejecutivo; y se asumió el rol de construir mayorías. "El Presidente le cobró al PS, al PPD y al FA las quitadas de piso a la ministra del Interior, Carolina Tohá", señaló uno de los timoneles.
Este martes se desarrolló el cónclave oficialista en Cerro Castillo, en medio de los intentos del presidente Gabriel Boric por mantener la unidad y disciplina en las coaliciones de Gobierno, especialmente, en materia de agenda de seguridad.
Si bien la cita comenzó pasadas las 20:00 horas, el mandatario fue el primero en llegar al Palacio de Gobierno ubicado en Viña del Mar, a eso de las 16:00 horas.
Posteriormente, lo hicieron los ministros del comité político y ya encima de la hora los líderes oficialistas.
Según quienes estuvieron presentes en la cita, primero comenzó hablando el Ejecutivo. A la ministra del Interior, Carolina Tohá, se le dio un largo rango de tiempo para exponer, pues la reunión estaba enfocada en la agenda legislativa de seguridad.
Actualmente, hay 31 proyectos en carpeta, que deben ser despachados en distintos rangos de tiempo.
Es por ello, que el presidente Gabriel Boric busca alinear a sus filas, y evitar lo ocurrido con la tramitación de la Ley Naín-Retamal, en donde Apruebo Dignidad votó en contra de un artículo clave: la legítima defensa privilegiada de las policías.
“El Presidente le cobró al PS, al PPD y al FA las quitadas de piso a la ministra del Interior, Carolina Tohá”, decía pasada la medianoche un timonel de partido que estuvo presente en la instancia.
Y así fue: el mandatario hizo un llamado de atención, pidiendo mayor disciplina y unidad a sus dos coaliciones, según confirmó el senador y presidente de Revolución Democrática, Juan Ignacio Latorre.
Recordemos que el pasado lunes, diputadas del Frente Amplio llegaron hasta el Palacio de La Moneda a pedirle “mayor liderazgo” a la ministra Carolina Tohá.
Esto se suma a una serie de episodios que no le gustaron a La Moneda, pues dejaba en evidencia la fractura oficialista.
La autocrítica del oficialismo tras cónclave liderado por presidente Boric
Al respecto, el secretario general del Partido Comunista, Lautaro Carmona, deslizó que hubo una autocrítica.
Antes de ingresar al cónclave, el senador y jefe del comité del Partido Socialista, Alfonso de Urresti, fue bastante directo, asegurando que “creo que la sociedad ha visto cómo han votado los distintos parlamentarios, y en estas situaciones no puede haber dos lecturas, no puede haber gustitos”.
El parlamentario apuntaba sus dardos a Apruebo Dignidad, tal y como lo hizo más temprano, en la mañana, el subjefe de comité, Gastón Saavedra.
Pero al salir de la reunión en Cerro Castillo, el senador De Urresti matizó sus dichos, apuntando a trabajar en unidad.
Ayer, el presidente de la Cámara de Diputados, Vlado Mirosevic, señaló que quedó como conclusión que todos se ponen detrás del combate a la delincuencia.
“El Estado no se preparó durante muchos años para combatir la delincuencia, pilló al Estado poco preparado”, aseguró el parlamentario.
¿Cómo se materializa el apoyo al Ejecutivo? ¿Implica votar en bloque? El diputado sostuvo que el acuerdo de seguridad implica 31 leyes, con cientos de artículos, lo que significa que es probable que no exista unanimidad en todo, lo que está bien, pero en el grueso de la agenda, sostuvo, habrá acuerdo en el oficialismo, pese a que siempre habrá espacios para matices.
La presidenta del PPD, Natalia Piergientili, concordó con esta lectura, y sostuvo que es necesario establecer un mecanismo para resolver rápido los disensos, que no entrampen la discusión de fondo.
El cónclave terminó pasada la medianoche, a eso de las 01:30 horas de la madrugada, donde la sensación generalizada es que ahora serán los presidentes de partidos quienes deberán ejercer liderazgo para alinear a sus filas.
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En el cónclave realizado en Cerro Castillo, el presidente Gabriel Boric pidió -a sus dos coaliciones- mayor unidad y disciplina parlamentaria, para enfrentar la agenda legislativa de seguridad que tramita el Congreso. En el oficialismo -principalmente en Apruebo Dignidad- se hizo una autocrítica por las "quitadas de piso" al Ejecutivo; y se asumió el rol de construir mayorías. "El Presidente le cobró al PS, al PPD y al FA las quitadas de piso a la ministra del Interior, Carolina Tohá", señaló uno de los timoneles.
Este martes se desarrolló el cónclave oficialista en Cerro Castillo, en medio de los intentos del presidente Gabriel Boric por mantener la unidad y disciplina en las coaliciones de Gobierno, especialmente, en materia de agenda de seguridad.
Si bien la cita comenzó pasadas las 20:00 horas, el mandatario fue el primero en llegar al Palacio de Gobierno ubicado en Viña del Mar, a eso de las 16:00 horas.
Posteriormente, lo hicieron los ministros del comité político y ya encima de la hora los líderes oficialistas.
Según quienes estuvieron presentes en la cita, primero comenzó hablando el Ejecutivo. A la ministra del Interior, Carolina Tohá, se le dio un largo rango de tiempo para exponer, pues la reunión estaba enfocada en la agenda legislativa de seguridad.
Actualmente, hay 31 proyectos en carpeta, que deben ser despachados en distintos rangos de tiempo.
Es por ello, que el presidente Gabriel Boric busca alinear a sus filas, y evitar lo ocurrido con la tramitación de la Ley Naín-Retamal, en donde Apruebo Dignidad votó en contra de un artículo clave: la legítima defensa privilegiada de las policías.
“El Presidente le cobró al PS, al PPD y al FA las quitadas de piso a la ministra del Interior, Carolina Tohá”, decía pasada la medianoche un timonel de partido que estuvo presente en la instancia.
Y así fue: el mandatario hizo un llamado de atención, pidiendo mayor disciplina y unidad a sus dos coaliciones, según confirmó el senador y presidente de Revolución Democrática, Juan Ignacio Latorre.
Recordemos que el pasado lunes, diputadas del Frente Amplio llegaron hasta el Palacio de La Moneda a pedirle “mayor liderazgo” a la ministra Carolina Tohá.
Esto se suma a una serie de episodios que no le gustaron a La Moneda, pues dejaba en evidencia la fractura oficialista.
La autocrítica del oficialismo tras cónclave liderado por presidente Boric
Al respecto, el secretario general del Partido Comunista, Lautaro Carmona, deslizó que hubo una autocrítica.
Antes de ingresar al cónclave, el senador y jefe del comité del Partido Socialista, Alfonso de Urresti, fue bastante directo, asegurando que “creo que la sociedad ha visto cómo han votado los distintos parlamentarios, y en estas situaciones no puede haber dos lecturas, no puede haber gustitos”.
El parlamentario apuntaba sus dardos a Apruebo Dignidad, tal y como lo hizo más temprano, en la mañana, el subjefe de comité, Gastón Saavedra.
Pero al salir de la reunión en Cerro Castillo, el senador De Urresti matizó sus dichos, apuntando a trabajar en unidad.
Ayer, el presidente de la Cámara de Diputados, Vlado Mirosevic, señaló que quedó como conclusión que todos se ponen detrás del combate a la delincuencia.
“El Estado no se preparó durante muchos años para combatir la delincuencia, pilló al Estado poco preparado”, aseguró el parlamentario.
¿Cómo se materializa el apoyo al Ejecutivo? ¿Implica votar en bloque? El diputado sostuvo que el acuerdo de seguridad implica 31 leyes, con cientos de artículos, lo que significa que es probable que no exista unanimidad en todo, lo que está bien, pero en el grueso de la agenda, sostuvo, habrá acuerdo en el oficialismo, pese a que siempre habrá espacios para matices.
La presidenta del PPD, Natalia Piergientili, concordó con esta lectura, y sostuvo que es necesario establecer un mecanismo para resolver rápido los disensos, que no entrampen la discusión de fondo.
El cónclave terminó pasada la medianoche, a eso de las 01:30 horas de la madrugada, donde la sensación generalizada es que ahora serán los presidentes de partidos quienes deberán ejercer liderazgo para alinear a sus filas.