CMPC, la Fundación Simón de Cirene y la Corporación Cultural de Puente Alto, inauguraron un espacio artístico que renueva el corazón del tradicional Estadio Papelero. Este, ubicado en la fachada del recinto deportivo, fue elaborado por vecinos y artistas locales.
Más de una treintena de vecinos de la comuna participaron directamente de la elaboración de esta obra, quienes se sumaron al diseño del artista local Ivo y a los talleres semanales liderados por los artistas de la Corporación Cultural de la comuna, Juan Sánchez, Alejandra López y Alexis Salinas.
En cada sesión, los asistentes pudieron aprender y practicar la técnica del mosaico y, finalmente, plasmar en la pieza tres conceptos centrales: historia, naturaleza y seguridad.
Cristián Cuitiño, subgerente de Relacionamiento Industrias de CMPC, explicó que “el Estadio Papelero es un espacio que nos permite el desarrollo de distintas actividades deportivas y culturales que, por cierto, apostamos a que en el presente y también en el futuro mejoren el estándar de vida y el bienestar de quienes habitan en la comuna, particularmente de nuestras vecinas y vecinos que están en la población papelera”.
“Así que estamos muy contentos de inaugurar este mural que es fruto del trabajo colaborativo entre lo público, lo privado y también las comunidades”, sostuvo.
Además de una intervención estética, el proyecto significó recuperar un espacio que constantemente era vandalizado y convertirlo en un punto de encuentro para la comunidad.
El director ejecutivo de la Corporación Cultural de Puente Alto, Miguel Ángel Castro, indicó que ser “testigo de cómo el taller provocó cosas bonitas de la gente, cómo la gente venía para acá con gusto a diseñar”.
“Creo que esta iniciativa debiese replicarse, continuar, porque es una alianza virtuosa cuando la empresa se junta con la institución y se junta con la comunidad. Felicito a la gente que participó de los talleres. Muchas gracias porque sus manos están ahí en cada una de las obras que engalanan ahora esta entrada”, añadió.
Los talleres se desarrollaron durante cinco meses en las dependencias del estadio, teniendo como resultado una obra de 49 metros cuadrados, realizada en técnica mixta, es decir, un 60% fue hecha con mosaicos y el otro 40% con pintura mural.
En concreto, la pieza que hoy adorna la fachada del recinto deportivo tiene como eje central a la Máquina 20, uno de los símbolos de la historia industrial de Puente Alto y considerada como el corazón productor de la Planta Cordillera, dado que en esta se procesan distintos tipos de papeles y cartones reciclados para la fabricación de papel, pasando por etapas de lavado, secado y dimensionado, los cuales permiten que la Máquina 20 produzca 30 toneladas de papel cada 40 minutos.
A través de una línea de tiempo visual, la obra muestra cómo el papel producido por esta máquina se convierte en origami y, finalmente, en naturaleza, representando el ciclo productivo de CMPC y su conexión con la vida cotidiana de los puentealtinos. El resultado es un diseño que invita a mirar el pasado y el presente de la relación entre La Papelera y la comuna desde el arte y la colaboración.
Para la vecina Roxana Bravo, “ver el mural terminado fue una emoción muy grande porque el Estadio Papelero nos acompaña desde muy pequeños, cuando veníamos a la piscina o a jugar, y ver que se están haciendo nuevas cosas, nuevos proyectos como este mural, a uno la reconforta y uno como que volvió a nacer y recordar”.
Por su parte, la subjefa del equipo de mosaiquistas y artes visuales de la Municipalidad de Puente Alto, Alejandra López, destacó que “todos nos sentimos súper orgullosos de haber finalizado esta obra, este hito que marca un antes y un después en el espacio urbano del Estadio Papelero y que reconoce no solo la gran participación que hubo de la comunidad, sino también que esta obra salió del corazón prácticamente de todos quienes colaboraran en su creación”.
De esta manera, el mural ubicado en Eyzaguirre 01450 en Puente Alto, se transforma desde hoy en un nuevo punto de encuentro para la comunidad, el que fue renovado gracias al interés y la participación de los propios vecinos en cada paso del proceso.