Como una reparación humillante calificó una de las víctimas del expárroco de Hualqui, Reinaldo Mendez, el ofrecimiento económico que le hizo la Iglesia Católica por el abuso sexual sufrido hace 20 años a manos del cura que actualmente cumple prisión preventiva en la cárcel El Manzano.

Tras expulsarlo del estado clerical, la Iglesia conformó una comisión de reparación para sus víctimas. En el caso de José Lara, era mayor de edad al momento de ocurrir el abuso, por lo que ha actuado como testigo de contexto en la causa por violación a un menor acólito entre 2015 y 2018 al interior de la parroquia.

Lara dice que tras varios meses la comisión de reparación le ofreció el pago de 20 millones de pesos en cuatro cuotas anuales. Debido a su negativa, el ofrecimiento se elevó a 36 millones, lo que también rechazó.

“Para nosotros, es un ‘tómalo o déjalo’. Osea ‘te estoy ayudando con esto, con esto otro (…) eso es lo que tú te mereces por tantos años de sufrimiento"”, indicó Lara, quien comparó los montos a los ofrecidos a las víctimas de Karadima.

Las primeras conversaciones para esta reparación se dieron en septiembre del año pasado entre José Lara, su padre, Fernando Chomalí y su vicario judicial.

En esa oportunidad, el propio arzobispo le ofreció costear la matrícula de una carrera técnica, pero luego en la propuesta formal fue incluido en el monto total, al igual que el tratamiento psicológico, psiquiátrico y medicamentos.

Por esto, Lara, que ejerce actualmente como guardia de seguridad, se siente profundamente decepcionado de la oferta que dice, no es una verdadera reparación.

“Es humillante revictimizar, aquí yo no estoy pidiendo un favor, no estoy pidiendo una limosna”, agregó José.

Reinaldo Mendez Sánchez, que está formalizado por delitos reiterados de abuso sexual y violación, fue enviado al penal penquista en octubre del año pasado, por incumplir el arresto domiciliario total al que estaba sometido.