El periodista y precandidato presidencial Harold Mayne-Nicholls abordó aspectos clave de su postulación y reveló detalles personales de su historial político. Todo en entrevista en el programa “De Frente” de Tomás Mosciatti y transmitido por Mega y BioBioTV.
Mayne-Nicholls busca reunir las 35.361 firmas necesarias para inscribirse como candidato independiente a La Moneda y así alcanzar la papeleta.
Frente a la pregunta sobre si logrará los patrocinios requeridos, Mayne-Nicholls respondió con seguridad que “sí, de todas maneras“. El precandidato detalló que ya cuenta con 28.850 firmas y afirmó que “las voy a reunir, vamos a llegar con las firmas”.
Respecto a su bajo desempeño en encuestas, argumentó que se debe a que no es oficialmente candidato ni representa a un movimiento o partido.
Votó por el “NO”, por Bachelet y por Piñera
Uno de los momentos más reveladores de la entrevista fue cuando se le preguntó por su voto en el plebiscito de 1988. Mayne-Nicholls declaró que “por el NO. Qué bueno que me lo pregunta, porque el otro día quise no decirlo y se armó un revuelo, y he descubierto que para la opinión pública es muy importante conocer todo para atrás”.
El precandidato también reveló su voto en la elección presidencial de 1999. “Lavín fue profesor mío en la universidad (Católica), un gran profesor. Tengo amistad con él y ahí voté por Lavín”, dijo.
Sobre votaciones más recientes, señaló que “voté por Bachelet y voté por Piñera, voté por los dos“, aunque precisó que en la segunda elección de Piñera apoyó a Alejandro Guillier. En la última elección, mencionó que “voté por Yasna (Provoste) y después voté nulo”.
Posibles colaboraciones y medidas de seguridad
Consultado específicamente sobre si votaría por José Antonio Kast, Mayne-Nicholls respondió que es “difícil”. Sobre Jeannette Jara, afirmó que “también” es difícil.
A renglón seguido, aclaró su postura hacia el Partido Comunista. “Dije difícil, no dije que no (votaría por Jara). El comunismo tiene un problema que a mí todavía me eriza la piel, cuando dice que vamos a luchar por la dictadura del proletariado, y eso no es enriquecedor“.
Sobre la posibilidad de integrar un eventual gobierno de Kast, Mayne-Nicholls afirmó que “tendría que conversar con él. Nunca le he cerrado la puerta a lo que me ha llamado Chile, donde creen que yo puedo cooperar”. Respecto a un gobierno de Jeannette Jara, dio “la misma respuesta. Tendría que conversar con ella, sentarme con ella”.
En cambio, se mostró más abierto a sumarse a una administración de Evelyn Matthei, “de todas maneras. Ojo, que hay una razón aquí, yo soy conocido de la Evelyn”.
En materia de seguridad y cárceles, Mayne-Nicholls expuso una medida concreta sobre los extranjeros detenidos. “En la medida que se pueda y que te los reciban (hay que) sacarlos del país. Antes de cumplir la pena que se vayan, adentro de la cárcel hacen más daño que volviendo a su país. (Que) dejen de estar en este país es lo que a mí me interesa”.