La Superintendencia de Educación Superior (SES) oficializó una nueva norma que regula la sana convivencia en campos clínicos en pos de los estudiantes del área de la salud, con el objetivo de resguardar su salud mental.

La regla establece obligaciones concretas a universidades, institutos profesionales y centros de formación técnica para promover lo anteriormente mencionado, a favor de los estudiantes del área que realizan sus prácticas formativas.

La medida era largamente esperada por las comunidades educativas de la salud y sus familias. Según detalló la SES en un comunicado, entrará en vigencia el próximo 1 de enero del 2026.

Nueva norma pretende resguardar la salud mental de estudiantes de la salud

Esto es el resultado de un proceso participativo que convocó tanto a instituciones de educación superior como a representantes estudiantiles, autoridades del sector salud y organizaciones de la sociedad civil.

El superintendente de Educación Superior, José Miguel Salazar, explicó que con esta nueva regulación, la Superintendencia refuerza sus capacidades para detectar amenazas o riesgos de abuso que pueden afectar la salud mental de los estudiantes que se forman en campos clínicos.

“Por una parte, se exige a las instituciones de educación superior un reporte semestral con el registro de denuncias sobre convivencia en estos espacios, de manera de asegurar que ellas sean resueltas oportunamente”, comunicó.

La SES aplicará también una encuesta a los estudiantes que hayan realizado prácticas clínicas durante el año, lo que permitirá contar con más y mejor información para orientar de manera más precisa las acciones de fiscalización, según declaró Salazar. Así, se contribuirá a la construcción de entornos más seguros.

Esta medida surge tras diversos casos que ejemplifican la problemática que la suscitó. Uno de ellos es el de Catalina Cayazaya, estudiante de Terapia Ocupacional de la Universidad de Los Andes que se suicidó luego de acusar maltrato por parte de profesoras.

Catalina, en sus dos internados -requisitos para terminar la carrera profesional- vivió maltrato por parte de sus tutoras. Se acusó que la joven recibió insultos y faltas de respeto, incluyendo situaciones irregulares mientras cursaba dicho proceso, el cual reprobó.

Aquello habría sido presentado a la dirección de la carrera, sin embargo, Catalina no habría recibido una respuesta.

Al respecto, José Miguel Salazar dijo que tras la lamentable muerte de Cayazaya, la Superintendencia había asumido el compromiso de establecer reglas claras y exigibles para proteger a los y las estudiantes en los campos clínicos, donde “se ha evidenciado una conflictividad creciente”.

La nueva norma hace recordar también el caso de José Miguel Galasso Hofer, estudiante de Medicina de la Universidad de Valparaíso que se suicidó en mayo del 2021 por la alta exigencia que se les imponía en la carrera.

Según relató en su momento la madre del joven, Odette Hofer, José Miguel dijo que en realidad, su carrera, le había traído la frustración de su vida.

Revisa el comunicado completo de la SES sobre la oficialización de la norma: