La CUT renovará su directiva en unas elecciones marcadas por la irrupción del Frente Amplio, que por primera vez disputará espacios en la multigremial, para imponerse ante el Partido Socialista y el Partido Comunista.

La CUT se alista para una nueva elección interna que definirá su conducción entre 2025 y 2029, donde más de tres mil dirigentes sindicales podrán votar electrónicamente entre el 26 y el 28 de mayo.

Por primera vez, el Frente Amplio participará con una lista propia, proponiendo un sindicalismo autónomo, ético y comprometido con las transformaciones sociales.

Desde la lista frenteamplista, el candidato, Luis Llaulén, destacó que su candidatura representa un trabajo colectivo con organizaciones del mundo del trabajo, y busca fortalecer el rol de la CUT en la defensa de los derechos laborales.

Desde los bloques tradicionales, el llamado fue a mantener el foco en los trabajadores. David Acuña, actual presidente de la CUT y candidato respaldado por el Partido Socialista, aseguró que las diferencias de opinión no han afectado el objetivo común de resguardar a la central como un espacio influyente para las organizaciones sindicales.

Por su parte, Eric Campos, secretario general de la CUT y representante del Partido Comunista, señaló que su lista reúne a dirigentes de múltiples sectores productivos y que la unidad se ha expresado también en torno a demandas concretas como el salario vital y la negociación colectiva ramal.

La elección no solo definirá a la nueva directiva, sino que también reflejará las distintas visiones sobre el papel que debe asumir la CUT frente a los desafíos laborales que siguen marcando la agenda nacional.