Homo Argentum, la comedia negra protagonizada por el reconocido actor Guillermo Francella, es un éxito en Argentina tanto a nivel comercial como político, ya que el presidente Javier Milei logró insertarla en la grieta que divide a los libertarios y, como él los denominó, al “ejército de zombis”. La dinámica es sencilla: si te gustó la película, estás a favor del gobierno; si no te gustó, en contra.
No es la primera vez que una producción cultural es llevada al irascible terreno político de Argentina, sociedad en la que la profundidad del debate se limita a una guerra entre dos bandos. Pasó este mismo año con la serie de ciencia ficción “El Eternauta”, éxito protagonizado por Ricardo Darín en Netflix que hizo gala del héroe colectivo y no individualista, y hace unos pocos años con la película “Argentina, 1985”, una revisión de los juicios contra los dictadores que fue premiada a nivel internacional.
Cómo es “Homo Argentum”: 16 versiones de Francella en pantalla
Recientemente estrenada en los cines de Argentina y Chile, “Homo Argentum”es un filme dirigido por Mariano Cohn y Gastón Duprat, la dupla argentina creadora de las series de Disney Plus “El encargado” -también con Francella-, “Bellas artes” y “Nada”, así como de las películas “El hombre de al lado”, “4×4” y “El ciudadano ilustre”, entre otras, que abordan las miserias de la sociedad trasandina con una mirada cáustica, algo irónica y poco sutil.
Agitada por fantasmas de la era de la cancelación, el feminismo y la violencia en las calles, la película está conformada por 16 historias cortas -algunas que duran lo mismo que un reel de Instagram- en las que Francella cambia de peluca, disfraz y escenario urbano para retratar a un millonario extorsionado por una mujer que lo acusa de violencia de género, a un cobarde justiciero inmerso en la paranoia de la inseguridad o a un cura de los barrios marginados, por ejemplo.
Sin embargo, lejos de la profundidad que las temáticas sugieren, Cohn-Duprat optan por el lucimiento de su actor fetiche repitiendo las onomatopeyas y los gestos cómicos que en televisión (“Poné a Francella”, “Casados con hijos”) tanto rédito le dieron, y apelan al redituable rage-baiting, responsable de la repercusión social. De hecho, la mayoría de las historias carece del esquema básico de conflicto, dejando como destino final la viralización en TikTok y estados de WhatsApp.
Si te gustó la película, estás a favor del gobierno; y si no, en contra
Como mayormente las críticas a “Homo Argentum” fueron entre regulares a negativas, el oficialismo rápidamente cogió el guante para su batalla cultural y vinculó a todo detractor con el tan “despreciado” kirchnerismo. Para reforzar la declaración, les hizo ver la película el pasado 12 de agosto a varios legisladores de confianza invitados a la Quinta de Olivos a cambio de que le garantizaran su blindaje a los vetos a leyes de discapacidad y jubilaciones (lo logró no más en este último caso).
Al sábado siguiente, cuando el filme de los 16 Francella llenaba más de 470 salas de toda Argentina -cifras similares a los tanques de superhéroes o animación-, el mandatario bajó línea en X, su red de cabecera, a la militancia y dejó en claro que la película tiene que dividir.
Milei no se guardó ningún adjetivo a la hora de declarar los principios: “Homo Argentum deja en evidencia muchos de los aspectos de la oscura e hipócrita agenda de los progres caviar (woke)”.
“A su vez, cuanto mayor la cantidad de parásitos mentales dentro de la cabeza del progre, mucho mayor es el odio y los alaridos quejosos de éste ejército de zombies (termos cabezas de pulpos) cuyas aspectos salientes de su existencia es ser envidiosos, resentidos, mentirosos, hipócritas y sobre todas las cosas ignorantes (al menos en economía)”, declaró el jefe de Estado.
Y amplió el vocabulario aún más: “Les duele mucho la película porque les presenta un espejo en el cual sale a la luz todo lo que son… casi está de más decir lo que les duele el éxito en una película sin financiamiento del Estado, ya que muestra a muchos del rubro (y aledaños) como fracasados totales y absolutos”.
Poco ayudó que, en paralelo, el actor Guillermo Francella se lanzara en contra del cine de autor, es decir, aquel que suele representar a Argentina en festivales internacionales y entregas de premios, pero que no goza del mismo fervor popular en los cines.
“Hay un cine que es muy premiado que le da la espalda al público. Ese cine no me gusta. Van cuatro al cine. Ni la familia del director va porque son obras de arte que no tienen identificación, no representan a nadie”, expresó Francella en el canal de streaming “Olga”.
Así como creó malestar entre sus colegas, los mismos que frecuentemente manifiestan sus quejas por los ajustes de Milei en el Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (Incaa), también le dio más razones a la militancia libertaria para defender “Homo Argentum” como emblema de la independencia de los fondos del Estado. Ya ni siquiera fue necesario ver la película para juzgarla, tal como lo dijo orgulloso Carlos Pirovano, presidente del Incaa.
Durante un debate del canal TN, el crítico de cine Pablo Manzotti, presente en la mesa del noticiario, tomó la palabra para preguntarle a Pirovano si efectivamente había visto “Homo Argentum” y cuáles eran sus argumentos para darle infalible respaldo. El titular del Incaa respondió: “No, yo dije que vi tiktoks. Cuando vos ves mucho TikTok, vos ves casi toda la película”.
“Homo Argentum” sí tuvo plata del Estado
Sin embargo, pese al orgullo mileísta por “Homo Argentum” y la postura en contra del financiamiento del cine nacional desde el Estado, la película de Francella recibió, al menos, 150 millones de pesos argentinos (unos 160.000 dólares al cambio de 2024) por parte del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires (CABA). Fue parte del programa de Cash Rebate llamado “BA Producción Internacional”, similar a los incentivos que tienen varias provincias argentinas y otros lugares en el mundo para impulsar la industria audiovisual en territorio local.
Desde el Estado -en este caso, la Ciudad de Buenos Aires- se cubren parte de los gastos invertidos por productoras de Argentina que realizan coproducciones internacionales o dan servicios de producción de largometrajes, series de ficción y animación.
El año pasado, Pampa Films, la productora de “Homo Argentum”, se anotó al programa estatal de CABA y recibió el monto de dinero, un equivalente al 12,13% de lo invertido durante el rodaje sólo en territorio porteño, tal como figura en la nómina de proyectos seleccionados el 19 de julio y publicado en el Boletín Oficial de CABA del 1 de agosto.
Aunque está instalada erróneamente en Argentina la idea de que el Estado financia el cine en desmedro de inversiones en infraestructura o ayuda social, en realidad es el propio consumo del cine el que incentiva su producción en Argentina.
El Fondo de Fomento Cinematográfico (FFC, establecido en la Ley N° 24.377 de 1994), está conformado por:
1. Impuesto del 10% sobre el precio básico de las entradas de cine, en cualquier ámbito y país de origen de la película. Por lo que cualquier espectador, con su ticket, aporta a la misma industria.
2. Impuesto del 10% del precio de venta de “videogramas grabados” (DVD o Blu-ray, hoy un mercado casi inexistente en Argentina). Años atrás, se llegó a analizar que impactara también -como en Francia, una de las mecas del cine- en las plataformas de streaming, la principal forma de visionado. Sin embargo, nunca prosperó.
3. El 25% del total de las sumas efectivamente percibidas por el Ente Nacional de Comunicaciones (Enacom), a partir del impuesto a la facturación de los canales de TV y servicios de cable por usar el espectro radioeléctrico.
Las cifras del éxito comercial de “Homo Argentum”
Seis de cada diez personas que fueron al cine eligieron ver “Homo Argentum”, que cerró su primera semana en cartelera en Argentina con 689.272 espectadores. El número instala al filme protagonizado por Francella como la tercera mejor semana histórica para una producción nacional.
Apenas “El clan” (2015), también con Francella como estelar, logró superar esos números con 809.032 entradas en sus primeros días y un total de 2,6 millones de espectadores. Antes, la animada “Metegol” (2013) había alcanzado 706.984 tickets en siete jornadas, para terminar arriba de los 2,1 millones. Ahora, “Homo Argentum” se anota en ese podio y, además, ya se ganó un lugar en el top 10 de lo más visto del año en Argentina.
La magnitud del logro se amplifica frente a lo que venía sucediendo en la alicaída taquilla nacional. Hasta ahora, el título argentino más convocante del año era “Mazel Tov”, de y con Adrián Suar, con 356.921 espectadores en 17 semanas.
Aunque es temprano para arriesgar una cifra definitiva, se estima que “Homo Argentum” superará con comodidad los 2 millones de entradas. Ese territorio, reservado para pocos títulos nacionales, acerca a la película al recuerdo fresco de “Relatos salvajes” (2014), que llevó a casi 4 millones de personas a las salas de Argentina.
Se espera que desde noviembre “Homo Argentum” esté disponible en Disney+ para toda Latinoamérica.