La embajada checa en EE.UU. salió a paso del polémico festejo de la joven tenista Sara Bejlek con su padre y el entrenador, hecho que causó revuelo en el mundo

Revuelo en el mundo causó la semana pasada una polémica celebración de una tenista de 16 años con su padre y entrenador en el Abierto de Estados Unidos. Imagen que causó indignación en redes sociales.

La tenista checa Sara Bejlek, 194ª del ranking mundial WTA, fue protagonista por la manera en que es felicitada después de lograr meterse en el cuadro principal del US Open 2022.

Un video que se hizo viral mostró como Jaroslav Bejlek abraza a su hija muy cariñosamente por su gran victoria en la ronda de clasificación. Luego, comienza a darle palmadas en el trasero y finalmente la escena culmina con un beso que pareciera ser en la boca. El coach Jakub Kahoun también le da un abrazo y palmadas.

Dada la repercusión del hecho, con dichos como “asqueroso”, “se pasaron”, “me indigna bastante” y “deberían investigar un posible abuso ahi”, la propia jugadora salió al paso y declaró que “por supuesto que vi el video. Fue una reacción espontánea de todo el equipo. Ciertamente puede parecer inconveniente e incómodo para algunos, pero ya lo hemos discutido con el equipo. No volverá a suceder”.

“Papá es mi papá y siempre lo será. Y conozco a mi entrenador desde que tenía ocho años. Si algo similar sucediera en la República Checa, nadie se ocuparía de ello. Pero como estamos en Estados Unidos, todo el mundo lo comenta. Pero como digo, hablamos y no volverá a suceder”, agregó.

Días después fue el turno de la embajada de la República Checa en Estados Unidos de dar explicaciones, bajándole el perfil a lo sucedido y saliendo en defensa de la joven tenista.

“No fue un problema en la prensa checa en absoluto. Es algo personal, cada familia es diferente. Tales cosas varían de una familia a otra“, dijo al Daily Mail el representante de la embajada checa en Washington.

Según los medios del país europeo que se hicieron eco del tema, estas reacciones son bastantes comunes en República Checa, aunque no todos lo toman de la misma manera.

Consultado sobre si el episodio empaña la imagen de la República Checa desde el punto de vista cultural, el representante no quiso opinar.