Érika Olivera, diputada y reconocido exdeportista, lamentó los distintos problemas que han afectado la organización de Santiago 2023.
Un nuevo lío afecta por estas horas la organización de los Juegos Panamericanos Santiago 2023 tras la renuncia de la directoria ejecutiva, Gianna Cunazza. Una decisión que critica la diputada y destacada exdeportista nacional, Érika Olivera.
En conversación con el programas Podría Ser Peor de Radio Bío Bío, Olivera, quien además preside la Comisión de Deportes de la Cámara Baja, cuestionó la serie de problemas que han ‘manchado’ el importante evento que arriba en octubre a nuestro país.
“Desde el día uno ha habido preocupación de muchos de nosotros, quienes venimos del mundo del deporte y hemos tenido la oportunidad de estar en grandes eventos deportivos, porque sabemos que a veces hay problemas en el camino”, explicó de entrada.
Olivera, que recordó que “la sede de los Juegos se consigue en 2017 con Michelle Bachelet, algo que todos celebrábamos”, también remarcó que “lo que ha ocurrido hoy es una consecuencia, pero no es la solución, que haya renunciado la directora ejecutiva”.
“Creo que han habido graves problemas de gestión”, detalló la exatleta, mencionando los problemas que han existido de licitación y de rendición. “Hay informe de Contraloria donde se destacan falencias”, acotó, añadiendo que “desde el congreso iniciamos una comisión investigadora”.
En relación a lo mismo, Olivera rememoró que “cuando terminaron los Odesur (Santiago 2014) hubo problemas de rendiciones al final, y nadie se hizo responsable, ni autoridades ni personas que estuvieron trabajando en la organización”.
Camarines con hongos en San Antonio
En otro tema, Érika Olivera también se refirió a su reciente visita al estadio de San Antonio, el que sufrió una remodelación hace 4 años y aún no ha sido entregado.
“Son cuatro años por lo menos donde los las personas de la comuna, deportistas y entrenadores, vienen insistiendo en plantear las problemática que hay, que lo único que quieren es hacer uso del recinto”, aseveró.
Eso sí, durante el recorrido, la propia Olivera se percató de otro conflicto: la presencia de una gran cantidad de hongos en los vestuarios. “Fue impresionante”, aseguró.
“No por que vamos a arreglar lo que falta en algún momento vamos a dejar que se llene de hongos”, apuntó con molestia Olivera contra la administración del recinto.
Finalmente, la parlamentaria explicó que, según las autoridades, el reducto no se ha entrado porque “hay espacios que no estarían cumpliendo con las normas, donde hay filtraciones, y se está esperando un peritaje que se levantó”.
