El presidente de Azul Azul, Michael Clark, lamentó los incidentes en el Clásico Universitario y pidió buscar nuevas y efectivas medidas para acabar con los desmanes en los estadios
El presidente de Azul Azul, Michael Clark, condenó este domingo los incidentes ocurridos en el clásico entre Universidad de Chile y Universidad Católica, duelo que terminó suspendido a los 32 minutos y con el marcador 0-0.
El árbitro Francisco Gilabert decidió no seguir jugando el duelo tras el lanzamiento a la cancha de numerosas bombas de estruendo y bengalas encendidas, acción que terminó con el cuarto árbitro y un camarógrafo de TNT Sports con trauma acústico.
Consultado por los graves desmanes en el Estadio ‘Ester Roa’, en Concepción, Clark declaró que “estamos con mucha pena y rabia. El espectáculo estaba bonito. Ambos clubes hicimos esfuerzos. Por culpa de delincuentes cobardes, que se tapan la cara, se arruinó. Esto está orquestado por delincuentes”.
“Debe haber una acción de los clubes, ANFP, autoridades, Ministerio Público, Carabineros y jueces para sacar de los estadios a esta gente”, complementó en rueda de prensa.
En la misma línea, el mandamás del fútbol de La U señaló que “no puede ser que estos tipos se salten los códigos y no les pase nada. Nosotros nos sumamos en cualquier mesa de trabajo desde el día martes”.
Incluso, el máximo dirigente azul respaldó a su homólogo de la UC, Juan Tagle, en la idea del retorno de Carabineros a los estadios para hacerse cargo de la seguridad.
“Todos acá tenemos la sensación que esto se veía venir porque hace rato viene el tema del mal comportamiento en los estadios, pero a cada cosa le llega su hora. Hoy tenemos que hacer algo que no se ha hecho antes”, aseveró Clark.
Para terminar, el regente del elenco colegial laico dijo que “nos reunimos con el General Director de Carabineros, Ricardo Yáñez, porque teníamos la esperanza de esto no pasara, pero lo veíamos venir“.
