Los motivos de la decisión pasaron por criterios futbolísticos tras un proceso que fue encabezado por todos los niveles del club estudiantil.

El 20 de agosto de 2022 fue el último día que el estadio de Universidad Católica abrió sus puertas al público. Tras esa fecha, el recinto entró en un proceso de modernización que permitirá ampliar su aforo a 20 mil personas en un proyecto con características únicas y nunca antes vistas en nuestro país.

Bajo ese contexto, Cruzados anunció este lunes que la cancha contará con una superficie de césped artificial del más alto estándar disponible a nivel mundial.

Los motivos de la decisión pasaron por criterios futbolísticos tras un proceso que fue encabezado por todos los niveles del club. El objetivo de la decisión es tener una cancha siempre en perfecto estado y con las mismas condiciones para los jugadores, todos los días del año, más allá de factores climáticos o de la intensidad de uso que se le dé al campo de juego. Adicionalmente, en la superficie sintética se podrán disputar partidos de manera más frecuente, impulsando el desarrollo del fútbol femenino y formativo del club, sin verse afectada la calidad del campo de juego.

El proveedor que se adjudicó la licitación, al que fueron invitadas las empresas más importantes y de mayor trayectoria a nivel mundial, es la compañía estadounidense FieldTurf. Se trata de una empresa líder en el rubro, que ha realizado más de 20 mil proyectos similares en todo el mundo.

Juan Tagle, presidente de Cruzados, afirmó que “seguimos haciendo historia con la modernización de nuestro estadio al resolver que la cancha tendrá la superficie sintética más moderna que se haya visto en el país y en Sudamérica.

“El ámbito futbolístico siempre será lo primordial de nuestra gestión por lo que previamente visitamos canchas en Brasil y Europa para conocer las mejores tecnologías disponibles a nivel mundial… Nuestro estadio tendrá la versión más moderna y de última generación”, agregó.

Respecto a la disponibilidad de la cancha, el máximo dirigente del elenco de la franja subrayó que fue un factor fundamental para escoger una superficie sintética. “El jugador valora disputar partidos en una cancha que conoce, y que sabe que siempre estará igual y en las mismas condiciones. Esa seguridad la provee esta superficie y así tendremos siempre una cancha impecable”.

“Lo positivo es que se podrá jugar de local, se use o no la cancha para otros deportes o actividades durante la semana. Nuestro estadio podrá ser usado de manera frecuente por el fútbol formativo, femenino e incluso albergar encuentros internacionales de otros equipos chilenos que no cuenten con un recinto para ejercer su localía”, complementó.

Decisión sustentable

Además de la disponibilidad, otro aspecto que pesó en la decisión de Cruzados fueron criterios de sustentabilidad. El nuevo estadio de la UC contará con una cubierta que hará más compleja la entrada de la luz solar y con eso, la correcta mantención de un césped natural. Asimismo, Chile es un país altamente vulnerable a los efectos del cambio climático y de un alto riesgo hídrico, con una sequía en ciernes en el área metropolitana.

En línea con la sustentabilidad, Cruzados exigió a los proveedores que participaron del proceso que el césped estuviera compuesto solo por materiales orgánicos que son amigables con el medio ambiente, descartando el caucho. De esta manera, el relleno del césped que se instalará será 100% de corcho, a la par de los requerimientos y regulaciones de césped artificial de la Unión Europea y la FIFA.

En específico, el tipo de césped artificial escogido para el futuro estadio de la UC es el Vertex CORE de FieldTurf, compuesto por dos tipos de fibra (monofilamento + fibrilado). El monofilamento es la fibra CORE de doble polímero. El polímero del núcleo es de mayor resiliencia para mejorar la resistencia y durabilidad y el polímero exterior es más suave y garantiza una mayor comodidad e interacción entre el jugador y la superficie. El césped tendrá una altura de 42 mm y 13 puntadas/10 centímetros.