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Deportes Iquique debutó en la Copa Sudamericana con una derrota 1-2 ante Caracas Fútbol Club, quien se posiciona en la cima del Grupo H con 3 puntos. Un error defensivo permitió a Iquique adelantarse en el marcador, pero Caracas remontó en cinco minutos con goles de Echenique y Aguilar. Caracas controló el juego y defendió su ventaja en el segundo tiempo, mientras Iquique luchaba por igualar sin éxito.

Deportes Iquique no pudo ante un efectivo y ‘mañoso’ Caracas Fútbol Club y cayó 1-2 en su partido de estreno en Copa Sudamericana, duelo jugado este martes en el estadio Tierra de Campeones.

Triunfo que instala a Caracas con 3 puntos en la cima del Grupo H de la Copa Sudamericana, que completan Cienciano y Atlético Mineiro.

Un error de la zaga del Caracas abrió la puerta para que Iquique se adelantara en el marcador, luego de que el central Luis Mago perdiera una pelota cerca de su área que terminó en los pies de Puch, quien fue derribado por Francisco La Mantía.

La ventaja de los locales no se tradujo en el juego, porque Caracas adelantó sus líneas, se apoderó del balón y controló las acciones.

Las opciones del equipo dirigido por el exfutbolista Fernando Aristeguieta se acumularon con intentos de Michael Covea y del joven delantero Echenique, mientras a Iquique le costó volver al área rival y recién sobre la media hora de juego tuvo su primer remate con un cabezazo desviado de Juan Pablo Gómez.

Caracas logra remontada ante Iquique en cinco minutos

Caracas emprendió la remontada con el tanto de Echenique a los 33 minutos, el tercero del ariete en esta Sudamericana tras marcar un doblete en la fase previa.

El atacante de 20 años le ganó en velocidad a la defensa del cuadro de Miguel Ramírez y al encarar a Requena definió con una volea por encima del guardameta.

El mexicano Aguilar cambió la historia del partido con un fino remate de pierna zurda que ya de qué hablar en el torneo.

Con la necesidad de nivelar, Iquique puso mayor iniciativa en el segundo tiempo ante un Caracas que salió a manejar su ventaja. Los venezolanos alargaban su estadía en el césped ante cualquier contacto, y con el contragolpe intentaron aumentar la cuenta.

El técnico Ramírez apeló a los cambios para darle mayor impulso a su ofensiva, ante un partido que perdió ritmo, y Enzo Hoyos fue el más peligroso junto con los disparos de Matías Moya, Álvaro Ramos y el propio Puch que no lograron puerta.

Con este resultado se agudiza la crisis del equipo del norte de Chile, colista de la Liga de Primera y ahora con mal pie en el comienzo de su aventura en la Sudamericana.