Archivo| Agencia UNO

¿Un cambio de motor que nunca existió? Transportista acusa a grupo Kaufmann y pide más de $17 millones

16 octubre 2025 | 06:00

En el 27º Juzgado Civil de Santiago, Juan Carlos Giovine demanda a Comercial Motores de los Andes SpA, miembro del grupo Kaufmann, por presunto incumplimiento: asegura que le cobraron un cambio de motor que nunca se realizó. Pide resolver el contrato y $17.948.820 por perjuicios. La firma alegó defectos formales en la demanda; el tribunal ordenó subsanar y el caso sigue en tramitación. Radio Bío Bío se comunicó con Kaufmann pero no respondieron a nuestras preguntas.

En el 27° Juzgado Civil de Santiago se está tramitando actualmente una demanda que podría transformarse en un ejemplo a seguir para muchas otras personas. Un transportista llamado Juan Carlos Giovine Ubilla acusa a Comercial Motores de los Andes SpA, conocido por ser miembro del grupo Kaufmann, de haberle cobrado un cambio de motor que nunca existió.

La acción judicial busca la resolución del contrato y una indemnización por $17.948.820, alegando incumplimiento contractual, perjuicios económicos y enriquecimiento sin causa.

“El motor nunca fue cambiado”

Según el escrito presentado por su abogada Cher Castillo Toledo, los hechos se remontan a julio de 2021, cuando Giovine llevó su furgón Maxus V80 Cargo Van al taller de la empresa ubicada en Avenida Américo Vespucio 760, comuna de Pudahuel.

El encargado del local le habría informado que el vehículo presentaba una falla grave en el motor y que era necesario reemplazarlo completamente, junto a diversos repuestos. El transportista aceptó el presupuesto, pues el vehículo era su herramienta de trabajo.

A pesar de que la reparación se extendió por meses, en noviembre de 2021, la empresa le envió un presupuesto definitivo por $9.058.633, según se relata en el escrito, y luego emitió una factura por el mismo monto. En la querella se asegura que Giovani pagó $5 millones en efectivo, pero poco después, en diciembre de ese mismo año, el vehículo volvió a fallar y quedó detenido en plena calle.

En ese minuto, decidió llevar el vehículo a otro servicio técnico, donde el diagnóstico fue devastador: el motor original seguía instalado y jamás había sido reemplazado. Pero además, a los pocos meses fue la empresa Andes Motor que presentó una acción judicial en su contra por no pago de factura.

Eliminado de los registros

Giovine relata, en la querella, que al intentar reclamar, el taller se negó a recibir nuevamente el furgón, argumentando que existía una factura impaga.

Ante la negativa, el transportista acudió a otro mecánico, donde pagó $2.948.820 adicionales para intentar dejar el vehículo operativo. Pero el daño ya estaba hecho: el furgón se deterioró rápidamente y debió venderlo en $15 millones, pese a que su valor comercial bordeaba los $25 millones.

En la presentación se indica que Giovine pagó $ 5 millones al demandado, además de los costos posteriores y la pérdida de valor del vehículo y acusa al taller de incumplir el contrato de manera dolosa y de enriquecerse injustamente.

Su abogada, explica en conversación con la Radio que “nosotros logramos hacer fue acreditar que se estaba haciendo un cobro de un motor que no era real, (…) llevamos el vehículo a la planta revisión técnica para que acreditara cuál era el número de motor y a qué vehículo correspondía y ahí se estableció que era el mismo motor de fábrica”.

Lo grave, agrega es que “la persona de Andes Motors tiene conciencia que cuando tú haces un cambio de motor tienes que hacer un procedimiento ante el Registro Civil porque ese vehículo está cambiando parte como de su identidad, entonces finalmente logramos acreditar en el tribunal y el tribunal rechazó el cobro de la factura”.

Ante esto, para continuar con la defensa “presentamos una demanda de indemnización de perjuicios porque esa factura es por una parte del cobro, en total eran 10 millones y fracción. Y él pagó 5 millones de pesos entonces lo que estamos pidiendo ahora es que se reembolse el pago de la parte de un motor que nunca se cambió”.

Defensa del taller

La empresa, representada por el abogado José Miguel Costa Cea, respondió con una excepción dilatoria, alegando que la demanda era “inepta” porque no precisaba correctamente la razón social de la compañía ni detallaba los hechos ni el cálculo del monto reclamado.

Según el jurista, “la demanda resulta vaga e ininteligible”, pues no describía con claridad “el servicio contratado, las fallas del vehículo ni los elementos que constituyen el daño reclamado”.

El tribunal acogió parcialmente esa objeción y ordenó subsanar el escrito, lo que fue cumplido por la parte demandante, que corrigió los datos y aumentó la cifra reclamada a $17.948.820.

Radio Bío Bío se comunicó con la empresa en más de una oportunidad para conocer su versión pero definieron no referirse al tema por ser un caso judicializado.

Posible precedente

El 27º Juzgado Civil de Santiago, a cargo de la jueza Jacqueline Solange Dunlop Echavarría, dio por subsanada la demanda y ordenó continuar con la tramitación.
El caso aún se encuentra en curso, pero podría transformarse en un precedente relevante para la protección de consumidores en el rubro automotriz.

Si la demanda prospera, Comercial Motores de los Andes SpA, representada por su gerente Sebastián Russi del Río, podría ser condenada a restituir los dineros recibidos y pagar la indemnización solicitada, marcando un hito en la responsabilidad contractual de los talleres mecánicos.