El 20 de noviembre de 2020, la Superintendencia del Medio Ambiente (SMA) ordenó “medidas urgentes y transitorias” contra una minera sudafricana en Chile.
En concreto, la determinación afectó al proyecto Salares Norte de Gold Fields, ubicado en la cordillera de Atacama, que busca extraer oro y plata.
Aquello tras constatar un daño “inminente al medio ambiente” por un posible incumplimiento grave de la empresa “en la ejecución de la medida de rescate y relocalización de ejemplares de la especie chinchilla durante la fase de construcción de dicho proyecto”.
En este caso se abrió una investigación por la lesión y muerte de ejemplares de una especie en peligro de este animal debido al avance del proyecto.
Según dijo a Reuters el superintendente Cristóbal de la Maza, la indagación está por llegar a su fin.
“Esta investigación ha seguido con su cronograma”, señaló el regulador al citado medio.
“En estos momentos está en proceso de concluirse y esperamos dentro de los próximos meses establecer si la empresa cumplió con las medidas que tenía comprometidas en su permiso ambiental”, añadió.
Aunque la información que maneja el organismo es confidencial, sí se sabe que la evaluación ambiental de la obra ordenó el rescate de nueve roqueríos, de un total de 14, donde se encontró a 25 chinchillas en peligro.
Salares Norte fue aprobado en 2019 y se encuentra a una altitud media entre los 3.900 (campamento) y 4.700 (rajo) metros sobre el nivel del mar.
Específicamente consiste en la explotación de minerales a rajo abierto con una tasa de procesamiento de 2 millones de toneladas por año.
Su vida útil se estima en dos años de construcción, 13 de operación y otros dos de cierre.
