Jorge Rojas, fundador de Coaniquem: "Un niño crece y sus cicatrices se encogen, haciendo más daño"

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El Dr. Jorge Rojas Zegers, fundador de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), fue reconocido con el Premio Nacional de Medicina 2024, por su larga trayectoria en el área de la salud.

El Dr. Jorge Rojas Zegers, fundador de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), fue reconocido con el Premio Nacional de Medicina 2024, por su larga trayectoria en el área de la salud, donde además de crear la fundación antes mencionada, impulsó la Ley 19.680, que prohíbe el uso particular de fuegos artificiales.

Frente a este hito, Rojas conversó con BBTV y expresó su alegría por “recibir un premio tan importante que dan los pares”.

“A mí me postularon. Evidentemente, desde Coaniquem hubo un interés de sacar esto adelante. Y después fue muy importante también el apoyo a la Universidad Católica. La Facultad de Medicina, donde yo me formé (…) Pero también hubo
mucho apoyo internacional. De todas las partes que nosotros hemos estado apoyando en Latinoamérica y el Caribe, que son 20 países”, relató.

En la misma línea, comentó cómo se formó y las dificultades que ha enfrentado con Coaniquem, fundación que nació en 1979. “Nos juntamos un grupo de personas y nos dimos cuenta que había algo que era indispensable que hacer por los niños con quemaduras”, dijo.

“Son muchos los que se queman. El niño crece y las cicatrices se encogen. Por tanto, se van haciendo cada vez mayor daño. Y eso no existía como un concepto en América Latina, la rehabilitación de un niño con quemaduras. Nosotros fuimos pioneros en partir descubriendo eso y empezamos a hacerlo, y pronto nos pidieron que lo hiciéramos en el hospital (…) Trabajaba en el Hospital Roberto del Río y ahí decidimos crear Coaniquem”, agregó.

De esta manera, explicó que crearon la institución, pero faltaba poner un centro propio. Faltaba un terreno, los planos, el dinero para construido y para funcionar. En ese momento, pensó que debía ser donde se cruzan las carreteras, cerca
del aeropuerto, porque algún día van a llegar los enfermos de todo Chile y del extranjero”.

Tras conseguir los planos, hablaron con el alcalde de Pudahuel, de ese tiempo, y les entregó un terreno prestado y, luego, con traspaso real. Posterior a aquello, tuvieron que golpear puertas.

“Se llenó de pacientes de Pudahuel. Después fue creciendo (…) Tuvimos la oportunidad de tener unos financiamientos transitorios al comienzo. Después lo hicimos permanente a través de los socios cooperadores que hasta el día de hoy nos aportan”, expresó.

“Eso es lo lindo. Coaniquem tienen su mayor parte de las tiendas solidarias, que la gente va a comprar y a su vez ayuda a cuidar el medio ambiente (…) El Ministerio de Salud también concurre, pero con un 23% de nuestro presupuesto”, añadió.

Por otro lado, también se refirió a la ley que prohíbe el uso particular de fuegos artificiales y reveló que “cuando nosotros tomamos conciencia que habían muchos niños con quemaduras por fuegos artificiales, empezamos a hacer una vigilancia epidemiológica (…) Esperábamos saber qué fuegos artificiales eran seguros, y cuáles no”.

“Llegamos a la conclusión que contiene fuego. Segundo, que una vez que se enciende es ingobernables (…) No importa si lo dispara un niño o un adulto”, agregó.

Ante ello, sostuvo que “logramos convencer al parlamente, y al Ejecutivo, de que esto había que aprobarlo, y por unanimidad de ambas cámaras, se aprobó el 2 de agosto del año 2000”.

Revisa todos los detalles en la entrevista completa.

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El Dr. Jorge Rojas Zegers, fundador de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), fue reconocido con el Premio Nacional de Medicina 2024, por su larga trayectoria en el área de la salud.

El Dr. Jorge Rojas Zegers, fundador de la Corporación de Ayuda al Niño Quemado (Coaniquem), fue reconocido con el Premio Nacional de Medicina 2024, por su larga trayectoria en el área de la salud, donde además de crear la fundación antes mencionada, impulsó la Ley 19.680, que prohíbe el uso particular de fuegos artificiales.

Frente a este hito, Rojas conversó con BBTV y expresó su alegría por “recibir un premio tan importante que dan los pares”.

“A mí me postularon. Evidentemente, desde Coaniquem hubo un interés de sacar esto adelante. Y después fue muy importante también el apoyo a la Universidad Católica. La Facultad de Medicina, donde yo me formé (…) Pero también hubo
mucho apoyo internacional. De todas las partes que nosotros hemos estado apoyando en Latinoamérica y el Caribe, que son 20 países”, relató.

En la misma línea, comentó cómo se formó y las dificultades que ha enfrentado con Coaniquem, fundación que nació en 1979. “Nos juntamos un grupo de personas y nos dimos cuenta que había algo que era indispensable que hacer por los niños con quemaduras”, dijo.

“Son muchos los que se queman. El niño crece y las cicatrices se encogen. Por tanto, se van haciendo cada vez mayor daño. Y eso no existía como un concepto en América Latina, la rehabilitación de un niño con quemaduras. Nosotros fuimos pioneros en partir descubriendo eso y empezamos a hacerlo, y pronto nos pidieron que lo hiciéramos en el hospital (…) Trabajaba en el Hospital Roberto del Río y ahí decidimos crear Coaniquem”, agregó.

De esta manera, explicó que crearon la institución, pero faltaba poner un centro propio. Faltaba un terreno, los planos, el dinero para construido y para funcionar. En ese momento, pensó que debía ser donde se cruzan las carreteras, cerca
del aeropuerto, porque algún día van a llegar los enfermos de todo Chile y del extranjero”.

Tras conseguir los planos, hablaron con el alcalde de Pudahuel, de ese tiempo, y les entregó un terreno prestado y, luego, con traspaso real. Posterior a aquello, tuvieron que golpear puertas.

“Se llenó de pacientes de Pudahuel. Después fue creciendo (…) Tuvimos la oportunidad de tener unos financiamientos transitorios al comienzo. Después lo hicimos permanente a través de los socios cooperadores que hasta el día de hoy nos aportan”, expresó.

“Eso es lo lindo. Coaniquem tienen su mayor parte de las tiendas solidarias, que la gente va a comprar y a su vez ayuda a cuidar el medio ambiente (…) El Ministerio de Salud también concurre, pero con un 23% de nuestro presupuesto”, añadió.

Por otro lado, también se refirió a la ley que prohíbe el uso particular de fuegos artificiales y reveló que “cuando nosotros tomamos conciencia que habían muchos niños con quemaduras por fuegos artificiales, empezamos a hacer una vigilancia epidemiológica (…) Esperábamos saber qué fuegos artificiales eran seguros, y cuáles no”.

“Llegamos a la conclusión que contiene fuego. Segundo, que una vez que se enciende es ingobernables (…) No importa si lo dispara un niño o un adulto”, agregó.

Ante ello, sostuvo que “logramos convencer al parlamente, y al Ejecutivo, de que esto había que aprobarlo, y por unanimidad de ambas cámaras, se aprobó el 2 de agosto del año 2000”.

Revisa todos los detalles en la entrevista completa.