El color de ojos de los perros podría estar determinado por los humanos. Esto es lo que sugiere un nuevo estudio realizado por científicos japoneses y publicado en la revista científica Royal Society Open Science, el cual ha descubierto que los ojos oscuros, cafés o castaños son más comunes en los perros domésticos que en sus parientes salvajes, y que los humanos perciben a los perros de ojos oscuros como más amistosos.
Según Molly Selba, anatomista de la Universidad de Maryland Eastern Shore -que no ha participado en el trabajo-, los resultados de este trabajo encajan con las investigaciones existentes sobre cómo el ser humano ha cambiado el aspecto de los perros a lo largo de la historia.
“Tiene sentido que el color de los ojos sea un lugar más en el que los humanos han dejado su huella”, dice en declaraciones recogidas por el medio online Science.
Humanos habrían “moldeado” a perros con ojos cafés
Según destacan en Science, el hombre ha moldeado a los perros desde que fueron domesticados por primera vez -quizá hace 20.000 años o más-, eligiendo animales amistosos, obedientes y buenos para trabajar con los humanos.
“Puede que también hayamos cambiado su aspecto, desde sus grandes ojos hasta sus grandes cabezas; rasgos “neoténicos” que nos recuerdan a nuestros propios hijos, transformando a los perros no sólo en compañeros, sino en bebés de peluche”, indican en Science.
Para Akitsugu Konno, científico del comportamiento de la Universidad de Ciencias de Teikyo (Japón) y primer autor de la investigación, “los iris más claros tienen alguna ventaja evolutiva para los lobos, pero la domesticación ha hecho perder esta presión selectiva y han aparecido ojos más oscuros en algunos perros primitivos“, afirma en declaraciones recogidas por The Guardian.
El equipo afirma que los ojos oscuros pueden haber sido favorecidos posteriormente por los humanos, posiblemente de forma inconsciente, durante la domesticación de los lobos a los perros. No obstante, Konno señala que el desarrollo posterior de determinadas razas también podría haber influido en el color de los ojos caninos. Así, por ejemplo, el color azul merle del pelaje que se observa en razas como los shelties y los border collies se asocia con los ojos azules.
La importancia del color
Konno y su equipo editaron fotos de perros de 33 razas -desde corgis galeses a loberos irlandeses- y aclararon u oscurecieron sus ojos. Mostraron selecciones de estas imágenes a 142 voluntarios japoneses, en su mayoría estudiantes, y les pidieron que valoraran a cada perro en función de rasgos como la amabilidad, la agresividad, la madurez y la inteligencia.
El equipo descubrió que los voluntarios eran mucho más propensos a juzgar a un perro como amistoso -calificándolo mejor en rasgos como la sociabilidad y la no agresividad- cuando la foto mostraba ojos oscuros. Los participantes calificaron a estos perros de menos inteligentes y menos maduros, y similares a los cachorros.
Los investigadores recalcan que la asociación de los ojos oscuros con la inmadurez podría influir en los humanos a la hora de proteger y cuidar a estos perros, aunque el estudio descubrió que el color de los ojos no estaba directamente relacionado con el hecho de que los participantes quisieran interactuar con el perro o quedárselo.
“En general, los perros de ojos oscuros pueden haber desarrollado este rasgo en gran medida como medio de enviar a los humanos una señal no amenazadora con la mirada”, escribe el equipo en declaraciones recogidas por The Guardian.
Selba, por su parte, considera que le gustaría que el equipo analizara si el fenómeno es válido para más de las aproximadamente 350 razas oficiales de perros que existen, y si el color influye en las posibilidades de ser o no adoptado más rápidamente.
No obstante, hay excepciones, como los huskies siberianos, dice Konno. Los ojos azules penetrantes habituales en esta raza hace entrever que podrían estar emparentados con los lobos más que con otras razas, especialmente en cuanto a su anatomía visual y comunicación, destaca el investigador en declaraciones recogidas por Science.
“Nos gusta mucho contar historias sobre la domesticación de los perros, pero ha sido difícil hacer estudios sólidos”, dice Jessica Hekman, veterinaria y genetista canina de la organización sin ánimo de lucro Functional Dog Collaborative.
Para Hekman, es posible que los perros adquirieran los ojos oscuros en los últimos siglos, pero para determinar un momento con exactitud habría que seguir investigando.
En opinión de Lisa Gunter, investigadora de comportamiento canino del Instituto Politécnico y Universidad Estatal de Virginia, este nuevo estudio plantea cuestiones interesantes sobre la evolución canina. No obstante, se abren interrogantes sobre la idea de que los perros de ojos oscuros parezcan más jóvenes.
“Como la mayoría de los perros tienen ojos marrones, la gente está más familiarizada con ellos y puede que simplemente prefieran aquello a lo que están acostumbrados”, dice Gunter, y añade que el hecho que las pupilas de los perros estén dilatadas suele significar que está nervioso, no que sea más simpático.