Señor Director:
¿Cuánto futuro se juega en los primeros años de vida? El Día Internacional de la Concienciación sobre el Crecimiento Infantil nos recuerda que el desarrollo pleno de niños y niñas no puede esperar.
El desarrollo en la infancia es la base para el desarrollo del ser humano. En esos primeros años se cultiva la capacidad de aprender, la salud y bienestar, el desarrollo cognitivo y la productividad en la adultez.
Sin embargo, la magnitud del problema sigue siendo alarmante, ya que 148 millones de niños menores de 5 años en el mundo sufren retraso en el crecimiento y 340 millones padecen carencias de micronutrientes. Para Latinoamérica, la desigualdad hace aún más profundas estas brechas, principalmente en comunidades vulnerables.
No se trata solo de cifras, sino de infancias con derechos en riesgo de vulneración. La desnutrición crónica y la falta de estimulación temprana dejan huellas irreversibles en el cerebro y en la vida, y se traducen en menor rendimiento escolar, menos ingresos en la adultez y oportunidades truncadas antes de empezar.
Pero hay soluciones simples y comprobadas que no son costosas, como la lactancia materna los primeros seis meses, una alimentación balanceada, los controles pediátricos y los programas de estimulación temprana. Cuando se implementan en los primeros años, estas medidas tienen un gran impacto en el futuro.
La evidencia demuestra que cada dólar destinado a nutrición y desarrollo infantil puede traducirse en hasta 16 dólares en beneficios sociales y económicos.
Hoy, más que nunca, es momento de actuar. El crecimiento infantil es también un indicador de equidad social y de nuestro compromiso con el futuro. La responsabilidad es de todos: gobiernos, organizaciones y familias debemos unirnos para garantizar que cada niño y niña crezca sano, fuerte y feliz. Porque el presente y porvenir de toda sociedad comienza en su infancia.
Por Martha Yaneth Rodríguez
Directora Ejecutiva de World Vision Chile