El presidente de la Cámara de Comercio de Concepción, Arturo Della Torre señaló que la capital penquista no está preparada para el término del Estado de Emergencia. De acuerdo al balance entregado este fin de semana, son 71 locales los que sufrieron daños y saqueos tras el término de una nueva jornada de protestas en las cercanías de la Plaza Independencia.

Concepción amaneció con gran parte de sus locales cerrados. Escombros y residuos de las barricadas encendidas este sábado, neumáticos quemados, arena, piedras, adoquines y vidrios quebrados, forman parte del día después de dos movilizaciones que se realizaron en la capital regional.

La avenida O’Higgins, entre Caupolicán y Anibal Pinto, quedó transitable tras las labores de limpieza ejecutadas por personal municipal. Cerca del mediodía, la misma calle sólo tenía un local abierto – de comida rápida – y un almacén. Mientras, en el paseo peatonal de Barros Arana, las tiendas que reanudaban su actividad comercial, a eso de las 12:00 horas, no superaron las 15.

Y es que el daño a la propiedad pública y privada a raíz de los disturbios ocurridos pasadas las 17:00 horas de ayer sábado, hizo que el tránsito normal de las personas, la locomoción colectiva y el comercio se reanudarán de forma parcial.

Los principales puntos afectados por los incidentes en el centro penquista, fueron el edificio de la Gobernación Provincial de Concepción, una librería, una sucursal telefónica y otra bancaria. En esta última, incluso sacaron la protección de madera que tenía. A ello se le suman farmacias pequeñas y pertenecientes a cadenas, además de la tienda Albano de Calle Los Carrera.

En total, 71 locales han sufrido daños y saqueos.

En ese contexto, Arturo Della Torre, presidente de la Cámara de Comercio de Concepción junto con lamentar estos hechos vandálicos indicó que la ciudad no está preparada para el fin del Estado de Emergencia en la zona.

“Cada marcha ya sabemos en lo que termina. No estoy en contra de las marchas, pero lamentablemente, el vandalismo, el delincuente, se ampara mientras están marchando y manifestándose pacíficamente para abrir locales”, sentenció.

El dirigente gremial anunció que espera reunirse con las autoridades de Gobierno y seguridad a fin de conversar sobre acciones futuras que vayan en beneficio del comercio penquista. Además, espera reunirse con exlíderes de la Cámara de Comercio y otros gremios.

La situación también preocupa a Irenia Gajardo, dueña de una funeraria ubicada en la esquina de Paicaví con Maipú. Ella vive y trabaja en ese lugar.

La mujer explicó que está estresada con los incidentes en los sectores donde se realizan manifestaciones, principalmente una vez que estas concluyen. Por lo mismo, vecinos y dueños de locales del sector resguardan sus puntos de venta durante gran parte de la noche.

Y si bien no está de acuerdo con el toque de queda, lo considera necesario para resguardar la seguridad del sector.

“Yo estoy de acuerdo con todas las marchas y con todo, pero con el desastre no estoy de acuerdo. Lo que uno pide es seguridad, el gobierno tiene que darle seguridad a su gente, a todos sus vecinos”, indicó.

En la Cámara de Comercio indican que existen dos Concepción: el del centro, cuyos locales abren por mediodía y cuyas cortinas cierran en la tarde todavía con el miedo de ser saqueados. Y el de otros sectores, incluso con una actividad diurna y nocturna relativamente normal.