Este lunes será formalizado Jordan Villanueva Salas, el autor confeso del crimen de una joven mujer en Lebu ocurrido la madrugada de este viernes.
En ese sentido, el Ministerio Público se encuentra realizando una serie de investigaciones para determinar si el asesinato de Lisette Riffo Cayupán -de 23 años- se configura como un delito de femicidio.
En Chile, según la Ley Nº 20.480 conocida como Ley de Femicidio, vigente desde fines de 2010, se tipifican como femicidio los crímenes cometidos contra una mujer a manos de sus esposos, exesposos, convivientes o exconvivientes.
En ese sentido, el fiscal Danilo Ramos, quien controló la detención de Villanueva y solicitó ampliarla por 72 horas, detalló que las indagatorias de la Fiscalía buscan “establecer a ciencia cierta cuál es la relación que tenía el imputado con la víctima”.
“Cuestión que -por cierto- resulta sumamente relevante para la calificación jurídica de los hechos”, añadió el persecutor.
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Para que se puedan formalizar cargos por femicidio en contra del ahora imputado, el Ministerio Público debe comprobar que existía una convivencia bajo el mismo techo entre víctima y victimario, puesto que no eran matrimonio, ni lo habían sido antes.
El crimen de Lisette quedó al descubierto este viernes, cuando la madre de Villanueva Salas llamó a Carabineros para pedirles que se consituyeran en su casa, ubicada en la población 27 de Febrero de la misma comuna.
Hasta allí llegaron efectivos de la Segunda Comisaría de Lebu. Entonces la mujer les aseveró que su hijo -quien se encontraba al interior del domicilio- había confesado el asesinato de la joven de 23 años, cuyo cuerpo se encontraba a 4 cuadras.
De tipificarse como tal, el crimen de Lisette sería el primer femicidio ocurrido en la región del Bío Bío en lo que va de 2019 y el sexto a nivel nacional.
Femicidios en 2019
El 1 de enero murió María (56) en Puerto Montt; el 2 de enero murió Sandra (49) en Rancagua, luego -el 5 del mismo mes- nos enteramos de la muerte de Laura (47) en Los Andes.
Posteriormente salieron a la luz los crímenes de Sajuste (29) en El Quisco -ocurrido el 8 de enero-, y el de Rosa (38) en Osorno, perpetrado el 14 de ese mismo mes.
Todas ellas fueron mujeres, madres o hijas; víctimas de la violencia más extrema en contra la mujer.
Mientras, según cifras del Serivicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG), en 2018 se perpetraron 42 femicidios.