Un preso fue ejecutado públicamente este martes en Irán tras ser condenado por violar a dos mujeres.
Según detallan medios como Al-Arabiya, la ejecución se llevó a cabo en Bastam, provincia de Semnan, al norte del país.
La sentencia había sido ratificada “tras una revisión exhaustiva por parte del Tribunal Supremo”, indicó el presidente del poder judicial provincial, Mohammad Akbari.
A su vez, la autoridad provincial añadió que el hombre había “engañado a dos mujeres y cometido violación mediante la fuerza y la coacción”.
Akbari aseveró que el acusado utilizó “intimidación y amenazas” para infundir temor a las víctimas.
Cabe destacar que la identidad del condenado, así como la fecha de su sentencia, no fueron dadas a conocer por las autoridades iraníes.
Organizaciones de derechos humanos afirman que la República Islámica, que ejecuta a la mayoría de los condenados en la horca, es el segundo país con mayor número de ejecuciones del mundo después de China.
En octubre pasado Amnistía Internacional reportó que más de 1.000 personas fueron ejecutadas en Irán en los primeros nueve meses de 2025, la cifra más alta documentada en quince años.
“El uso de la pena de muerte para delitos de drogas continúa a un ritmo terrible, en clara vulneración de las obligaciones de derecho internacional de Irán”, señaló la entidad.
“Las ejecuciones se llevan a cabo tras juicios manifiestamente injustos y celebrados a puerta cerrada, en un marco generalizado de tortura y confesiones forzadas”, agregó.