La Fiscalía alemana investiga a un anciano de 100 años, como sospechoso de haber sido guardia del campo de concentración Nazi de Hemer, en el periodo de la segunda guerra mundial, y estar relacionado con la muerte de 24.000 personas.
En este sentido, las autoridades de la ciudad de Dortmund señalan que los crímenes ocurrieron entre diciembre de 1943 y septiembre de 1944, afirmó el fiscal Andreas Brendel el lunes, confirmando una información de Bild.
El hombre se habría desempeñado en el campo de prisioneros de guerra antes mencionado, al que ingresaron al menos 100.000 soldados, la mayoría soviéticos, y en el que murieron miles de ellos.
Muchos procesos similares han sido iniciados en los últimos años, con base en el realizado en 2011 al ex guardia de campo de la muerte de Sobibor, John Demjanjuk, pese a que no se suministró prueba de que matara directamente a alguna persona.
Asimismo, el pasado 2 de abril murió a los 100 años un exguardia del campo de concentración nazi de Sachsenhausen, en el este germano, que estaba acusado de complicidad en al menos 3.322 muertes ante la Audiencia Provincial de Hanau (sur), antes de que ésta pudiera decidir sobre la apertura de un posible proceso.
El deceso se produjo cuando los peritos aún estudiaban si el hombre estaba en plenas facultades para poder enfrentarse a un juicio.
Según la acusación, el hombre había custodiado a los prisioneros como miembro de la división ‘Totenkopf’ de las “SS”, y también se le había encomendado la vigilancia de los transportes de prisioneros y su traslado desde la estación de ferrocarril al campo principal.
En 2022, otro exguarda de Sachsenhausen, de entonces 101 años, fue condenado a cinco años de prisión por complicidad en 3.500 asesinatos.
Ese mismo año una antigua secretaria del campo de concentración de Stutthof, durante la ocupación nazi de Polonia, fue condenada a dos años de cárcel por complicidad en 10.505 casos de asesinato.